30 meses después de iniciada, la transición hacia un modelo de Sistema Integrado de Transporte Público en Bogotá, está resultando más difícil y costosa de lo previsto. La adaptación de los usuarios al nuevo modo de transporte colectivo se dificulta por diversas barreras y anuncios de especificaciones en la operación que no se cumplen. La accesibilidad es inexistente en amplios porcentajes del servicio. La insatisfacción es general.
Implementado el 70% del SITP, conductores en condiciones laborales no adecuadas pasaron de recaudar dinero de pasajes a estar pendientes del cronometro en mano con el cual tienen que cubrir trayectos de rutas prolongadas. Si incumplen horarios sus ingresos se afectan, es el reglamento de algunas empresas operadoras.
El sueño de todos los bogotanos por tener movilidad justa y un sistema de transporte público adecuado y digno, está aún lejos de cumplirse por la cruda realidad que vive la ciudad hoy en proceso de transición de un modelo tradicional a un Sistema Integrado de Transporte Público, que aún tiene pendientes especificaciones básicas.
Después de 30 meses de iniciar el proceso de implementación y con un avance del 70%, hoy los bogotanos aún no se sienten satisfechos con el Sistema Integrado de Transporte SITP, en la ciudad.
El Sistema Integrado de Transporte Público heredó del modelo tradicional de transporte una serie de dificultades que lo hacen poco atractivo para los usuarios su utilización.
Los problemas de infraestructura, asociados a paraderos, la insuficiente o inexistente accesibilidad de la flota, el desequilibrio en las frecuencias y rutas, y la ausencia de unos patios de estacionamiento conlleva que el sistema este cometiendo una serie de fallas del servicio que preocupan a los bogotanos
El SITP, está representado el servicio de rutas Urbanas que atienden las demandas de pasajeros por corredores sin troncalizar; cuyo origen-destino no es cubierto por el sistema troncal de Transmilenio.
Factores a fortalecer del SITP:
Los Paraderos: lugares de espera para acceder al servicio o salir de él, están asociados al funcionamiento del componente zonal del sistema (rutas urbanas, complementarias, alimentadoras y especiales).
Señalética del sistema: es el conjunto de señales gráficas que le permiten al usuario, la comprensión del sistema para su adecuada utilización (por ejemplo la diferenciación por colores
de la tipología de rutas, las banderas con las rutas, mapas de rutas, etc.).
Los Terminales y patios: infraestructuras para el aparcamiento de los buses, donde se efectúan las labores de mantenimiento, despacho de vehículos.
Los lugares terminales donde inician y finalizan rutas.
La Tarjeta inteligente, como medio de pago único, que permite la integración tarifaría del sistema.
Las empresas zonales quienes se encargan de la operación del sistema.
Los conductores que prestan el servicio.
Las rutas, entendida estas que pertenecen a un sistema flexible, no rígido, pueden ser fácilmente adecuadas. El cambio de modelo cuesta en adaptación para todos. Desafío pendiente. Lucy Jimena Toro Torres Concejal de Bogotá