Bogotá es la ciudad de todos

Colombia vive una auténtica crisis migratoria, y de nada servirá mirar hacia otra parte o referirse a ella con eufemismos que le resten importancia o pretendan opacar la realidad. Y es que este no es un tema nuevo para el país, pues el desplazamiento interno ascendió a 7,7 millones de personas, según la Agencia de la ONU para los Refugiados ACNUR-, y llevó incluso a otras personas a salir al extranjero.

Ahora, el panorama ha comenzado a transformarse dentro de esta misma lógica y los colombianos somos quienes estamos llamados hoy a mirar a la cara a los migrantes y vecinos venezolanos para despertar un sentido compasivo que nos ayude a encontrar caminos que garanticen la dignidad de todos aquellos que se vieron forzados a dejar sus hogares en lamentables circunstancias. Quizás quienes hemos vivido en la condición de ser migrantes, en situaciones favorables o no, dentro del país o en el extranjero, estamos llamados con más fuerza a enseñar qué significa establecerse en territorios lejanos. 

Asimismo, no olvidemos que alrededor del planeta el flagelo de las grandes migraciones causa un sufrimiento enorme como el que padecen 25,4 millones de sirios que dejaron atrás sus hogares en medio de los bombardeos y deben enfrentar hoy el cierre de las fronteras de buena parte de los países de Europa. De igual manera, también somos espectadores de migraciones menos numerosas, pero con resultados no menos trágicos, como la de los más de 800 mil libios (Organización Internacional para las Migraciones) que intentan cruzar el mediterráneo, o los ciudadanos centroamericanos que son entre 300 mil y 700 mil (CEPAL y Gobierno de México) llegando con sus familias a inmediaciones de la frontera con EE.UU. tras inagotables caminatas.

De Venezuela ya partieron 4 millones de personas, y Colombia, que recibió 1.260.594 de ellas, es el país con el mayor número de migrantes, incluso por encima de Perú, Chile, Estados Unidos y España. Además, 1 de cada 5 venezolanos, según datos de Migración Colombia, se ha quedado en Bogotá, ciudad que se consolida entonces como la región con mayor recepción de ciudadanos del vecino país. 

El gobierno distrital no puede enfrentar en solitario esta situación. El alcalde Enrique Peñalosa acertó al disponer de manera temporal el refugio para los ciudadanos venezolanos y de forma permanente la Casa del Migrante.

Pero estas medidas, encabezadas por la Secretaría de Integración Social, resultan ineficientes en recursos financieros y humanos, si no van acompañadas de una política nacional que asuma la crisis migratoria como lo que es, y no como una oportunidad mediática en el contexto internacional que convocó a los gobiernos de la región para establecer un cerco diplomático hacia Venezuela, dejando de lado la posibilidad de establecer acuerdos de cooperación internacional con sentido humanitario.

Bogotá se prepara para evaluar su próximo plan de ordenamiento territorial POT, y venimos arrastrando de años atrás déficits en distintos frentes para ofrecer servicios públicos de calidad: vivienda, educación, salud, seguridad, alimentación, cultura, recreación, etc. Así, la vulnerabilidad actual de una parte de la población venezolana, como la de cualquier otra población frágil y en condiciones de pobreza que habita en la ciudad, requiere de un estudio serio en relación con el crecimiento urbano que veremos en los próximos años. 

No olvidemos que hace pocas semanas la Defensoría del Pueblo lanzó una alerta sobre la vulnerabilidad de la población en los límites del distrito entre la localidad de Ciudad Bolívar y el municipio de Soacha, donde la presencia estatal es mínima, e incluyó menciones sobre la instrumentalización de la población joven venezolana entre grupos armados.

La capital de Colombia ha sido durante décadas la ciudad que recibe a los colombianos provenientes de todos los rincones del país, y dejó de ser un centro urbano para unos pocos. Hoy Bogotá es claramente la ciudad de todos, y debe continuar con los brazos abiertos, en una apuesta en la que cada uno de nosotros, nacionales o extranjeros, sigamos apostando al mismo tiempo por la tolerancia y las reglas mínimas que nos regalen una convivencia pacífica en la ciudad que más que un territorio es el hogar de cada uno de nosotros.

Muchos colombianos migramos, por corto o largo tiempo, a países en el extranjero. Y sólo viajando, más allá del turismo, es posible comprender qué significa estar bajo las lógicas de la migración. Y, aun así, quienes viajamos a estudiar tampoco comprendemos las dificultades de quienes llegan a buscar un nuevo hogar lejos de su país de nacimiento. Incluso muchos colombianos realizaron esta travesía hacia Venezuela.

Donde sí tenemos experiencia es en la migración de muchos compatriotas desde sus regiones hacia ciudades centrales, especialmente a Bogotá, donde hace mucho convive una mezcla extraordinaria de raíces y expresiones culturales de todo Colombia. Difícilmente podemos hablar ya de los cachacos tradicionales. Bogotá les abrió la puerta a todos para buscar un mejor futuro.

Y, aun así, Bogotá es tan sólo un paso para algunos, que quieren saltar de aquí a otras grandes ciudades en busca de nuevas oportunidades.

 

Bogotá es una ciudad de migrantes

  • Al país entraron en 2018 769.726 venezolanos.
  • Colombia es el país que más venezolanos ha recibido, incluso por encima de Perú, Estados Unidos y España, y Chile.
  • Según el Migration Policy Institute, los migrantes Centroamericanos hacia EE.UU. ascienden a 300.000, pero cifras menos positivas del gobierno Mejicano ascienden a 700.000 (de un histórico cercano a los 15 millones, según la CEPAL).
  • Para 2018, se calculaba entre 700.000 y 1.000.000 de migrantes libios.
  • Desde SRI Lanka han partido 1.726.900 migrantes.
  • Los refugiados sirios alcanzaron los 25,4 millones.
Logo de El Concejo de Bogotá en TV
El Concejo de Bogotá en TV

Logo de Sesiones del Concejo de Bogotá
Sesiones del Concejo de Bogotá

Logo de Qué pasó en el Concejo
Qué pasó en el Concejo

Logo de LSC
LSC

Logo de Audiencia Pública de Rendición de Cuentas
Audiencia Pública de Rendición de Cuentas

Logo de Ordenes al Mérito y Convocatorias
Ordenes al Mérito y Convocatorias

Logo de Transparencia
Transparencia

Logo de Gestion Pública Transparente
Gestion Pública Transparente

Logo de Bancadas Informales
Bancadas Informales

Logo de Sindicatos
Sindicatos

Logo de Intranet
Intranet

Logo de Directorio Telefónico
Directorio Telefónico