Con la renegociación de los contratos del SITP, Bogotá le da una segunda oportunidad a un sistema de transporte público que había fracasado. Así lo manifestó el Concejal del Centro Democrático, Diego Molano Aponte, tras la firma de la Administración Peñalosa, Transmilenio y los operadores de los buses azules.
“Ahora hay que garantizar que cambie el sistema, que tengamos buses eléctricos, mejores conductores, cumplimiento y ampliación de rutas, mejoramiento en los horarios y que no se permitan los colados, tal y como lo exigían más de 1 millón 500 mil bogotanos que estaban hastiados de la mala calidad de la operación”, dijo
Molano manifestó que este nuevo esquema no es solo para salvarlos financieramente sino para garantizar el servicio. “Tendremos un transporte más sostenible que garantice estándares de calidad para que los ciudadanos se sientan satisfechos con unos buses y un sistema digno.
A partir de ahora se deberán desmontar los buses del SITP provisional y salir de las calles estos vehículos viejos y muchos de ellos chimeneas andantes para que sean reemplazados por carros modernos, seguros y sobretodo no contaminantes.
Con la firma de este otrosí, la administración destinará 1.7 billones de pesos en diez años para financiar el sistema.
Los concesionarios por su parte además de reducir los costos operacionales, deberán controlar los colados. Los operadores recibirán incentivo por pasajero recogido.
El Concejal dijo que se da un paso fundamental para mejorar la calidad de vida de los bogotanos
