Bogotá Pasa de los Carteles de la Contratación a los Negocios de Familia

Una de al principales irregularidades que denunciamos entonces, fue la extensión de la vida útil de los buses articulados en 240.000 kilómetros, lo que equivale a extender una cuarta parte del tiempo que ya se había estipulado en un millón de kilómetros.

Con las versiones conocidas, se entiende o por lo menos se explica la generosidad del Alcalde Mayor con esto operadores, continuar recibiendo las ganancias pactadas, sin renovación del parque automotor, por tres años más.
Pero más preocupante aún, es la afirmación de que en este proceso de negociación la intermediación realizada por particulares ante la Gerencia de TrasMilenio, se tranzaron coimas por cerca de 2.000 millones de pesos.

Es necesario, que el Alcalde Mayor, presto a saltar a los balcones del Palacio de Liévano a arengar a sus copartidarios para evitar su salida de la alcaldía, hoy retome esa misma energía, iniciativa y prontitud y explique a la ciudadanía y a los organismos de control, el accionar que tienen sus círculos familiares en la gestión Distrital.
Es grave pasar que del cartel de Emilio Tapia, pasamos a los de los familiares de Petro. La ciudadanía exige explicaciones frente a los temas de posible corrupción. Que rueden las cabezas que tengan que rodar.

Y el Personero Distrital, al igual que el Contralor Distrital, les hacemos un llamado para que adelante con prontitud las averiguaciones del caso y no callen, como en las irregularidades de la Universidad Distrital, que a esta altura aún no se ha pronunciado el señor Personero.