Además, es un anuncio improvisado si se tiene en cuenta que la situación legal del hospital está sin definir. La ciudad debe saber que la Superintendencia de Notariado y Registro declaró en marzo pasado la ilegalidad de las transacciones de venta que se han hecho de los predios del hospital desde 1923.
Eso significa que no es claro si es verdad que el alcalde puede expropiar, como pretende hacerlo, los predios que hoy están en cabeza de la extinta Fundación San Juan de Dios.
¿Qué va a pasar si en unos días o semanas, o meses, la Superintendencia de Notariado y Registro confirma, después de los estudios de títulos que, en efecto, las ventas han sido ilegales y por lo tanto la Fundación San Juan de Dios no es la dueña de esos predios?
La alcaldía dice que va a expropiar a la Fundación San Juan de Dios, que es la que aparece como dueña. ¿Y qué va a pasar si la Superintendencia concluye que es otro el propietario? ¿Qué va a pasar si para el momento en que se aclara la titularidad de los terrenos el Distrito ya le ha pagado más de 150 mil millones de pesos a la Fundación que es el precio del que se ha venido hablando por los terrenos del hospital?
El otro tema que todavía no es claro, aunque el Distrito insista en decir que sí, es que hay un pasivo pensional y unas obligaciones laborales que no se han pagado y por las que un grupo de extrabajadores del hospital ha insistido en mantener una toma de las instalaciones por más de 15 años.
Es una situación que debería definirse antes de que el Alcalde comprometa los recursos públicos en un proyecto que puede quedar frustrado en el camino por problemas jurídicos. No hay una solución de fondo a la vista.
Lo claro es que al Hospital San Juan de Dios lo han venido utilizando para eventos y actividades, pero nada de fondo. El Distrito dijo que lo iba a comprar, y no pudo hacerlo por la falta de claridad de los títulos. Entonces, ahora el alcalde acude al expediente de la expropiación para saltar por encima de esos líos jurídicos.
Es un nuevo distractor del señor alcalde de la ciudad, como ha sido el tema de prohibir las corridas de toros en la ciudad. Se nota que el señor alcalde está en campaña y está utilizando distractores de este tipo para terminar su gobierno.