Entre los parques beneficiados hay que señalar Las Américas, el Simón Bolívar y el Virrey; entre las ciclorrutas están Juan Amarillo y Alameda el Porvenir, además de las vías secundarias de las localidades de Kennedy, Rafael Uribe Uribe y Antonio Nariño.
También ha llegado alumbrado moderno al centro histórico, a zonas rurales de Ciudad Bolívar y Usme, a entornos de universidades como la Libre y la Distrital, zonas de rumba y comercio a cielo abierto como la Primero de Mayo, el Restrepo, la Zona Rosa y Usaquén, y a grandes avenidas como las calles 26 y 63.
Bien por el servicio de energía, calidad es lo que necesita la ciudad, porque además contribuye a mejorar la seguridad. Es una noticia positiva.
Por acciones como esta se entiende que un servicio básico como la energía tenga una buena calificación de los organismos de control, como acaba de ocurrir con el concepto de la Superintendencia de Servicios Públicos sobre la calidad del servicio de Codensa.
No solo salió bien calificada, sino que aumentó su puntaje en relación con mediciones anteriores y cuenta con certificación de calidad de su proceso de distribución expedido por Bureau Veritas.
Lo más importante es que el concepto de los usuarios refleja ese resultado, como lo muestra la última encuesta de Percepción Ciudadana del Programa Bogotá Cómo Vamos en el que las personas entrevistadas calificaron con 81 por ciento el nivel de satisfacción del servicio de energía en la ciudad.
Una nueva medición reflejará aún más satisfacción gracias a la iniciativa de la actual administración de actualizar de la mano con Codensa el alumbrado público de la ciudad, que está cambiando parques y grandes avenidas que ahora están iluminados con la mejor tecnología.
Concejal de Bogotá