La educación es un derecho fundamental y por supuesto debe cobijar a los niños y jóvenes sin distingo de etnia, condición económica, víctimas del conflicto armado, desplazados, víctimas de violencia, trabajadoras, vulneradas, extranjeras, con capacidades y talentos excepcionales, con trastornos de aprendizaje o con discapacidad”
El cabildante conservador recordó que sido el resultado de un consenso en mesas de trabajo POR MAS DE UN AÑO Y MEDIO, con la administración distrital y entidades privadas, de tal manera que pueda darse una efectiva aplicación a las disposiciones que contiene, esta iniciativa es la respuesta a una población que exige una educación inclusiva que responda a sus necesidades y debe hacerse en cumplimiento de una norma nacional cuyo plazo de vencimiento para su implementación es en el año 2022.
Carrillo Campo resaltó que la expedición del decreto 1421 de 2017 ha sido el paso más contundente que se ha dado en materia de garantías para el acceso a la educación de personas con discapacidad “Queda mucho por hacer, hay que sensibilizar a maestros, rectores, coordinadores, padres de niños regulares e inclusive hasta a los mismos padres de niños con discapacidad que no quieren, es un reto enorme, pues hay una gran barrera, pero con la expedición del Decreto 1421 de 2017, se pretende a 2022, lograr las condiciones para el acceso educativo para la población con cualquier clase de discapacidad, incluyendo, por supuesto el auditivo, sin barreras, que se brinden procesos educativos con calidad para lograr la continuidad y permanencia en los centros educativos por parte de esta población, además se incluirá educación bilingüe bicultural, por lo que, resulta oportuna esta iniciativa, para ir preparando a Bogotá, D.C., como pionera, en esta oferta bajo los parámetros legales del referido decreto nacional.
Cel 3165224964