- Se entregará condecoración a las Fundaciones PLAN y Niñas Sin Miedo por su trabajo en pro de los derechos de la niñez, especialmente el empoderamiento y liderazgo de las niñas.
- De acuerdo con UNICEF la desigualdad de género se produce desde los primeros años de vida. Las niñas entre los 5 y 9 años de edad dedican un 30% más de tiempo que los niños a tareas domésticas. La situación crece más a medida que las niñas se hacen mayores, entre los 10 y 14 años dedican un 50%.
- Según el Banco Mundial no educar a las niñas, ocasiona a los países pérdidas de productividad e ingresos entre los 15 y 30 billones de dólares. La ONU indica que Colombia es el tercer país más desigual del mundo.
- Cifras de la Secretaría de Educación indican que actualmente 26.060 niñas entre los 5 y 16 años no asisten a la escuela.
- En Bogotá entre los años 2016 y 2017 se registraron 25.742 casos de embarazo en adolescentes. La tasa de deserción escolar por ser madres es de 1.1%.
- Una niña educada y empoderada tiene más posibilidades de tener un mejor futuro social, económico y profesional, así como tendrá menos probabilidades de ser esposa y madre antes de los 18 años.
Ser niña en Colombia debería significar una oportunidad inmensa de empoderamiento para construir proyectos de vida, sin embargo ser niña en el país es todavía una condición arraigada entre la desigualdad.
La organización de Naciones Unidas declaró el 11 de octubre Día Internacional de la Niña para sensibilizar a países en desarrollo como el nuestro, sobre la dura realidad que enfrentan las niñas. Cada hora en el país hay una alerta de maltrato infantil, las niñas son las más afectadas, de 100 casos denunciados el 80 % son niñas.
El Concejal Nelson Cubides Salazar hace un llamado a la ciudadanía y al Gobierno Distrital para no seguir sumando ciclos de desigualdad:
“Está demostrado que no invertir en la educación de las niñas genera grandes atrasos en los territorios. Cuando las niñas no terminan la educación básica y secundaria, o no aprenden en la escuela lo que se necesitan para ser productivos como adultos, los costos potenciales son muy altos, en términos de igualdad económica, social y calidad de vida. Sin embargo resulta más dinámico aún que no desarrollen habilidades de liderazgo y empoderamiento; la mejor preparación que puede tener una mujer a temprana edad está en aprender a tomar decisiones con juicio crítico y propósito para ejercer autoridad, respeto consigo misma y hacia los demás. Este camino nos permitirá alcanzar la igualdad de género en el menor tiempo posible” manifiesta el concejal Cubides.
De acuerdo con UNICEF la desigualdad de género se produce desde los primeros años de vida. Las niñas entre los 5 y 9 años de edad dedican un 30% más de tiempo que los niños a tareas domésticas. La situación crece más a medida que las niñas se hacen mayores, entre los 10 y 14 años dedican un 50%.
El reto que tenemos en Bogotá es grande. De acuerdo con cifras de la Secretaría de Educación, actualmente 21.060 niñas entre 5 y 16 años están por fuera del sistema, de esta cifra 4.530 son niñas menores de 5 años y 8.147 tienen entre 6 y 13 años y lo más preocupante es que la cobertura en educación básica en la capital tuvo una reducción de 2.2%. Según la última encuesta de calidad de vida de Bogotá Cómo Vamos., Mientras en el 2016 la cifra era de 92.1%, en 2017 bajo a un 89,9 %.
El embarazo adolescente es otro de los grandes desafíos que tiene la capital, y aunque entre los años 2016 y 2017 esta problemática tuvo una reducción significativa, pasando de 13.762 casos a 11.980, las cifras siguen siendo alarmantes. La tasa de deserción escolar por ser madres para la ciudad es de 1.1%.
En las instituciones del Distrito existen infinidad de estrategias y programas como respuesta oportuna a este flagelo, sin embargo las cifras demuestran que no han sido tan eficaces. Es urgente que pasemos de la visibilización de la problemática, a las acciones. Un trabajo articulado entre Estado, Familia y Sociedad reduciría generaciones de pobreza y contribuiría a romper los ciclos de vulnerabilidad a la que se ven sometidas las niñas.
¿Es necesario modificar las políticas educativas? Es urgente ampliar y mejorar la cobertura de educación, innovar en la forma como se aprende y se enseña, emprender programas compensatorios en las escuelas, que permitan el empoderamiento de las niñas y los niños como sujetos activos en el desarrollo y liderazgo de las niñas. Así como programas de convivencia para las familias reconocer su participación activa y sensibilizar la importancia de contar con entornos seguros en los hogares de las niñas.
Por esta razón resulta tan importante reconocer y destacar la labor que adelantan las Fundaciones PLAN y Niñas Sin Miedo, por su trabajo en pro de los derechos de la niñez, especialmente el empoderamiento y liderazgo de las niñas en la ciudad, como sujetas activas de derechos y transformación social.
Fundación PLAN: trabaja por un mundo justo que promueva los derechos de la niñez y la igualdad de las niñas mediante el empoderamiento a los niños, niñas, jóvenes y sus comunidades para generar cambios duraderos que aborden las causas de la discriminación contra las niñas, la exclusión y la vulnerabilidad.
Fundación Niñas Sin Miedo: su objetivo es empoderar a niñas y adolescentes de la Capital en situación de vulnerabilidad para la prevención de violencia de género y embarazo en la adolescencia, por medio de la educación experiencial, la práctica deportiva en bicicleta y el apoyo psicosocial.
Más información
Alexandra Trujillo P.
Jefe de Prensa Concejal Nelson Cubides
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