Un proyecto que se presenta nuevamente luego de que fuera archivado en 2017 negándole al creciente número de peatones y biciusuarios la oportunidad de contar con una red integrada a la estructura ecológica principal que, según el concejal Jorge Torres, permite que esta valorización tenga una connotación verde para la ciudad, ya que prioriza obras que fomentan la movilidad sostenible y la intermodalidad.
En esta oportunidad, para que el cabildo pueda decirle Sí a la valorización, favorece que nos encontramos en una época de recuperación económica a la que le vendría bien una aceleración por cuenta de nuevas obras civiles. La inflación ya se encuentra en niveles deseados (2,8%) y la confianza de los consumidores ha tenido aumentos exponenciales, comparando que en junio de 2017 estaba en -11,7 mientras que para junio de 2018 ascendió a 15,5.
Este cobro está contemplado para predios de estratos 4, 5 y 6, lo que indica que quedarían exentos de la contribución, los predios con uso estrictamente residencial que tengan asignados los estratos 1 y 2 y aquellos que cuyo avalúo catastral no supere los 400 millones de pesos del estrato 3.
¿Qué ganarán los ciudadanos?
De aprobar el proyecto, la ciudad va a contar con una red de movilidad fortalecida gracias a la construcción o reconstrucción de 20 aceras y ciclorrutas en 8 corredores viales (Calle 92 y 94, carrera 15, auto norte, calle 116 en todo su tramo, carrera 9ª, puente peatonal calle 112, canal Molinos con ciclopuente y canal San Francisco), así como 2 corredores ambientales (canales Boyacá y Córdoba) y 5 infraestructuras viales (La Sirena, 134, 15, 19 y Zona Industrial), además de un Centro Cultural.
Sin embargo, frente a estas obras Torres reitera su posición de descartar del grupo aquellas obras contempladas en el eje San Francisco, pues “en este punto reconocemos que es inconveniente una ciclorruta debido a la falta de justificaciones técnicas frente a la realidad de los viajes en bicicleta, sumado al rechazo de la comunidad, un escenario que se repite con el parque Canal Boyacá, donde los habitantes ya se apropiaron de las obras recientes de espacio público a lo largo del mismo”.
Cabe resaltar que en esta oportunidad el Proyecto de Acuerdo recoge varias de las observaciones y aportes planteados por el concejal Jorge Torres en la ponencia realizada en la discusión del 2017, entre ellas:
- · Accesibilidad para personas con algún tipo de limitación física
- · Manejo silvicultural urbano y compensación por tala del arbolado urbano.
- · Mantenimiento de las obras contempladas en el proyecto por parte de las entidades correspondientes.
- · Creación del comité distrital de valorización y vigilancia.
- · Plan de veedurías ciudadanas.
- · Mayor control en la ejecución de las obras por parte del Concejo de Bogotá.
La iniciativa llevada al Concejo también señala que la contribución de Valorización podrá ser pagada de contado, en cuotas o mediante la transferencia al Distrito de suelos necesarios y requeridos por el IDU para la construcción de las obras de infraestructura pública.
En esa medida, la valorización podría representar un cobro único que, en esta ocasión, no tiene efectos en la economía de los hogares con menores ingresos, y representa un gasto transitorio para los hogares de mayores ingresos en unas zonas específicas de la ciudad que, en últimas, beneficiará a los mismos propietarios.
