Los cerros orientales deben ser defendidos de los invasores
Los bogotanos estamos siendo testigos de la invasión sistemática y descarada que bandas inescrupulosas están haciendo en los cerros orientales, cerca de la avenida Circunvalar, a los ojos de todos los ciudadanos, en pleno centro de la ciudad.
Desde la propia avenida Circunvalar se ven los cambuches que han venido creciendo en los últimos meses. Comenzaron con cuatro y ya van 73, según las cifras de la alcaldía local de Santa Fe, que ha realizado varias intervenciones este año. El problema es que los invasores han vuelto, y cada vez con más personas.
No han valido los operativos que ha venido realizando desde enero pasado la alcaldía de Santa Fe apoyada por la Policía y la subsecretaría de Seguridad porque las invasiones no son simples ocupaciones de personas sin vivienda, sino el producto de acciones delincuenciales que utilizan a personas vulnerables para ocupar el cerro.
Los vecinos nos han dicho que en el lugar han escuchado enfrentamientos con armas de fuego y ya las autoridades lo han comprobado y han identificado que la ocupación está orientada por invasores profesionales que se quieren adueñar del cerro para lotearlo y venderlo como han hecho en otras zonas de la ciudad.
Las propias personas que están en el cerro han denunciado a hombres armados que les cobran 800.000 pesos por dejarles instalar un cambuche en el sector contiguo al cerro de Monserrate.
En la invasión hay personas de diferentes regiones del país, como las costas atlántica y pacífica. Es urgente que la administración pueda identificar quiénes realmente son personas desplazaadas y quiénes hacen parte del esquema criminal de invasión en la ciudad para actuar en defensa de los cerros y de las víctimas.
Como concejal respaldo las acciones de las autoridades distritales que están en la obligación de intervenir y rescatar el cerro porque estamos hablando de un patrimonio ecológico de la ciudad.