La ausencia de competencias claras para las localidades, la dispersión de funciones y la falta de control sobre la gestión local, ha mantenido e incluso ha perfeccionado complejas redes de corrupción, así como graves faltas administrativas, que serán denunciadas hoy 17 de julio por el Concejal Diego García del Partido Alianza Verde.
En el marco de la investigación adelantada, se lograron establecer cinco tipos de fallas graves que merecen destacarse:
1. La contratación de organizaciones sin patrimonio propio, sin sede y sin renovación de inscripción, para desarrollar contratos cuya cuantía supera los mil millones de pesos.
2. La publicidad personal con recursos del erario público.
3. La práctica del “cambis-cambeo” entre localidades. Al mismo tenor del “yo te elijo-tu me eliges” en las altas cortes, a nivel local se ha consolidado el “yo contrato-tu contratas”.
4. La suscripción de contratos con otros municipios sin una clara justificación técnica del valor agregado de su oferta.
5. La institucionalización de los convenios de asociación por montos nunca antes vistos en el Distrito Capital, que ha generado una altísima concentración de la ejecución local en muy pocas organizaciones.
6. Relaciones jurídicas entre Alcaldes Locales y socios de las ONG contratistas del distrito.
Todo lo anterior sumado a la preocupante reducción de la capacidad de pago o giro de los recursos locales en el año 2013, que puso en niveles más bajos, que los del año 2001. Se pasó de un promedio de giro de 50,9% en el 2009, a un 40,8% en el 2013.
Y lo más grave. Tampoco se ha avanzado en las soluciones estructurales anunciadas en el Plan de Desarrollo Bogotá Humana: no se ha radicado al Concejo de Bogotá un proyecto de acuerdo sobre aclaración de competencias locales, no se ha logrado concretar el Estatuto de Planeación Distrital y no se conocen avances sobre el sistema de seguimiento a la descentralización. Estaríamos frente a cuatro años más perdidos para las localidades.