Paradójicamente este lunes es el Día Mundial de la Discapacidad Física
Alrededor de 1.200 niños bogotanos que utilizan los denominados centros de atención Avanzar e Integrarte en donde son atendidos por algún tipo de discapacidad, podrían quedarse sin ese servicio al finalizar el mes de diciembre debido a que los contratos que actualmente rigen, concluyen en dicha fecha y no hay certezas de su renovación, situación que se conoce hoy cuando paradójicamente a nivel global se conmemora el Día Mundial de las personas con discapacidad.
En concreto son 472 niños internos que se atienden en Integrarte, 465 de manera externa y en Avanzar son 240 niños para un total 1.177.
La situación crítica que advierte la concejal del Polo Democrático Xinia Navarro, tiene como antecedente reciente la situación que se evidenció en marzo del presente año cuando igualmente los contratos también finalizaron y la población de Avanzar e Integrarte fue reubicada en los centros Crecer, que son operados por la Secretaría de Integración Social, los cuales no cuentan con la capacidad dotacional ni la infraestructura requerida por los usuarios para ofrecer el servicio que se requiere.
Negativa a adición presupuestal
Para evitar una penosa situación como la que vivieron los niños y jóvenes y sus familias en marzo pasado, la concejal en desarrollo del debate del presupuesto de 2019 recientemente aprobado por la Comisión de Hacienda del Concejo, solicitó una adición para la Secretaría de Integración Social por $1.800.000.000, dinero que estaría destinado de manera exclusiva para la atención en los centros Avanzar, propuesta que fue desechada de manera lamentable.
Mientras en Avanzar e Integrarte, los niños y jóvenes con discapacidad tienen a su disposición los implementos que requieren, en Crecer la atención es básica y sin las especificaciones requeridas como es un soporte que incluya fisioterapia, nutricionista y demás especialidades que conforman el cuidado diferenciado que cada persona requiere.
Valga aclarar que en Crecer están los jóvenes con una discapacidad menor en tanto en Avanzar los jóvenes tienen una limitación más severa y en Integrarte todos son mayores de 18 años.
La no oportuna intervención del Distrito para renovar los contratos y/o efectuar una nueva licitación, conlleva también a que las familias que en su gran mayoría son de escasos recursos, deban destinar a uno de sus miembros para el cuidado de la persona con discapacidad con la consecuente disminución de ingresos para el núcleo familiar.
Otra de las angustias que hoy viven las familias con personas en condición de discapacidad es el estudio que actualmente adelanta la Secretaría de Integración Social con el cual se revalúan los criterios de focalización los cuales empiezan a aplicar el 14 de diciembre con los cuales se limitarían los cupos. “Se han realizado visitas para determinar cuáles familias pueden tener sus niños en casa, cuando si acudimos a estos centros es porque los niños están recibiendo el cuidado especial que requieren y con los profesionales que también son los idóneos”, afirmó una de las mamás de un niño en condición de discapacidad.
La concejal Xinia Navarro exhorta a la Administración Distrital para que sea eficiente en ese proceso de renovación de contratos y adelante con el debido tiempo la licitación para que las personas atendidas no sufran mayores vicisitudes a las que ya sobrellevan y tengan así una vida digna.
