Se trata de 131 positivos confirmados; 113 de habitantes de calle y 18 de funcionarios, en una situación que era totalmente prevenible desde el momento en que se conocieron los primeros casos a finales del mes de mayo y que como ha quedado en evidencia, no contó con una estrategia para evitar que se extendiera el contagio, no solo en el hogar de paso, sino en las calles de la ciudad con una población a todas luces vulnerable y que hoy esa cifra contribuya a los 14.537 contagios de Bogotá.
El Distrito minimizó la situación, la indiferencia con la que trataron el asunto permitió que avanzara con velocidad el contagio en los usuarios y su personal en una sola sede. Ahora pregunto: ¿cuántas pruebas han realizado en este centro?, ¿qué atención se brindó a los infectados?, ¿qué protocolos se implementaron al conocer la confirmación de esos casos?, ¿de qué manera se ha venido trabajando el cerco epidemiológico?, ¿se ha extendido el contagio a familiares o cercanos del foco inicial? ¿los habitantes de calle positivos guardaron el aislamiento?, ¿hay más brotes de contagio en otros hogares de atención?, ¿cómo se vigila un cerco epidemiológico, si la secretaría de salud no tiene información sobre si salieron de Bakatá pacientes asintomáticos?
En menos de un mes el contagio superó cualquier expectativa. La situación de los habitantes de calle, y recicladores en condición de vulnerabilidad que acuden a los servicios del Distrito y el hecho de que su permanencia dentro de las instalaciones no sea total, genera un riesgo mayor; pero todavía más grave es que aun sabiendo que tienen la libertad de salir en cualquier momento, al día de hoy no se tenga certeza de en qué estado y dónde permanecen los 113 habitantes de calle positivos en las pruebas.
En pleno pico de la pandemia, urge que el control sea estricto y la atención integral, preocupa que la ciudad aporte más del 32% de los casos de Covid-19 en el país, que hayamos superado el 50% de ocupación de las UCI, que a pesar de que se endurecen las medidas en diferentes localidades los casos sigan en aumento, que la información no sea clara sobre el cerco epidemiológico y que se pierda del mapa a los contagiados. Se requiere la revisión, evaluación de las medidas existentes y la implementación de mejores protocolos de atención sobre esta población en aras de frenar el contagio.
Concejal de Bogotá
