La iniciativa del Concejal Marco Fidel Ramírez, que pasará a sanción del Alcalde Peñalosa en los próximos días, fue motivada por la dura realidad que deben vivir diariamente casi un millón de usuarias del transporte en Bogotá, según el estudio Thomson Reuters que lo calificó como el más peligroso del mundo para ellas y de acuerdo con la encuesta de la Secretaría Distrital de la Mujer, que evidenció como el 64% de las mujeres han sido víctimas de algún tipo de agresión sexual en Transmilenio.
Para Ramírez esta iniciativa, “siendo una acción afirmativa, no viola el principio constitucional de igualdad y tampoco va dirigida a generar segregación entre hombres y mujeres. Es una medida para disminuir de forma inmediata el fenómeno de violencia contra las mujeres en el Sistema de Transporte y a mediano plazo, un cambio cultural”.
De acuerdo con el Cabildante de Opción Ciudadana, no se requiere policía para la aplicación de esta acción pedagógica; como tampoco se necesita fuerza pública para que los usuarios cedan las sillas azules, pues solo se da de forma voluntaria y como producto de la regulación social.
Lo que sí se espera, de acuerdo con el Concejal de la Familia es “que a propósito de esta acción afirmativa se genere reflexión en la Capital, sobre la importancia de respetar a las mujeres para que no sigan siendo víctimas de violencia sexual en ningún lugar por su condición de ser mujeres”.
