Si no cambiamos buses viejos de TM condenamos a muerte a los bogotanos

Una gran noticia que acaba de entregar el alcalde Enrique Peñalosa: de 31 propuestas que se presentaron a la licitación para renovar los buses de TransMilenio, 17 proponen soluciones de gas, 3 eléctrico y 17 diésel con tecnologías avanzadas.

Eso demuestra que la posibilidad de tener una flota para las fases I y II con combustibles limpios está en camino y será un proceso gradual y lento hasta llegar al 100 por ciento. Es importante empezar cuanto antes la renovación de los 1.400 buses que tienen más de 15 años de uso. Es una prioridad de seguridad, ambiental y de salud para los bogotanos.

 

Son 925 nuevos biarticulados y 458 articulados que no solo implicarán disminuir las descargas contaminantes al aire sino mejorar la capacidad transportadora. Los primeros tienen capacidad para 250 pasajeros, frente a 160 de los articulados.

 

Este solo aspecto impactará favorablemente en la calidad de vida de los usuarios, pues se aumenta la capacidad transportadora en un 50 por ciento.

 

Los 1.400 buses que entrarán en servicio como efecto de la licitación pública que fue suspendida por 30 días el pasado 30 de julio, por petición de diferentes actores, entre ellos la Procuraduría, no van a comenzar a opera tan rápido como se tenía previsto, y además el ingreso será gradual. Así que, entre más se demore el proceso, más lenta será la renovación.

 

En marzo pasado se había anunciado que la licitación sería adjudicada en junio para que los nuevos vehículos comenzaran a reemplazar a los viejos a finales de este año. Con las demoras que llevaron a suspender la licitación, la adjudicación ya se atrasó tres meses y se fijó una nueva fecha para septiembre de este año.

 

Es razonable que con una licitación de aproximadamente 1,6 billones de pesos sea necesario tener todos los cuidados y el blindaje para garantizar transparencia y el buen uso de los recursos públicos. Sin embargo, hay que trabajar con celeridad porque el sistema TransMilenio en sus fases I y II tiene un nivel de colapso que debe solucionarse con urgencia.

 

El otro elemento que es preciso no perder de vista es que además de la adjudicación del reemplazo de la flota, TransMilenio deberá licitar la operación de esos buses, en razón a la decisión que tomó de separar los dos procesos para que la ciudad no quede atada a que quien suministre la flota sea el mismo que la opere.

 

Así que, si una licitación no avanza, podríamos tener problemas con la segunda. Por eso bienvenida la noticia de la Alcaldía de que la mayoría de las propuestas, 3 eléctricas y 17 a gas, proponen tecnologías limpias.

 

A esta altura del proceso sabemos que están dadas las condiciones para que la mayoría de los buses funcionen con tecnologías limpias, e incluso Ecopetrol acaba de anunciar que anticipará la fecha en que empezará a suministrar diésel más limpio, que beneficiara a TransMilenio. Bogotanos, si no cambiamos buses viejos, condenamos a muerte a Bogotá.

 

El anuncio que se hizo es que se bajará de 50 a 10 partes por millón la cantidad de material particulado (ppm) en el diésel, y eso bajará las emisiones contaminantes en al menos un 80 por ciento según los estimativos de Ecopetrol.

 

Es importante que no demoremos más el proceso, los pasajeros piden a gritos soluciones, y la renovación de la flota no se puede seguir demorando.

 

Lucía Bastidas

Concejal de Bogotá

Logo de El Concejo de Bogotá en TV
El Concejo de Bogotá en TV

Logo de Sesiones del Concejo de Bogotá
Sesiones del Concejo de Bogotá

Logo de Qué pasó en el Concejo
Qué pasó en el Concejo

Logo de LSC
LSC

Logo de Audiencia Pública de Rendición de Cuentas
Audiencia Pública de Rendición de Cuentas

Logo de Ordenes al Mérito y Convocatorias
Ordenes al Mérito y Convocatorias

Logo de Transparencia
Transparencia

Logo de Gestion Pública Transparente
Gestion Pública Transparente

Logo de Bancadas Informales
Bancadas Informales

Logo de Sindicatos
Sindicatos

Logo de Intranet
Intranet

Logo de Directorio Telefónico
Directorio Telefónico