Sin dejar rastro, 240 personas desaparecen cada mes en Bogotá

Recorriendo hospitales, clínicas, cárceles, la morgue y amigos, cientos de familias buscan a diario a un familiar desaparecido.

 No hay pistas de su paradero. Son casos sin información. Nadie da razón de ellos. Un día salieron de su casa, de su trabajo o de su colegio y su pista se perdió.

 En Bogotá la historia se repite ocho veces al día. Sin que nadie lo perciba, sin que sus nombres importen, desaparecen y dejan en la orfandad a sus familias, a sus amigos. El dolor que deja su ausencia es inexplicable, está marcado por la incertidumbre, por el desasosiego. Se siente, según cuentan quienes lo viven un frío que recorre todo el cuerpo.

 Son los desaparecidos que no tienen un lugar en la agenda pública. Solo de vez en cuando aparecen en las noticias como una estadística más, pero para las familias son el martirio diario, la búsqueda constante, el deambular sin rumbo en busca de una pista que de razón de su paradero. En cada esquina su imagen aparece y desaparece en rostros desconocidos. Es la ansiedad por hallarlos que hace que las familias los vean en todas partes.

 Al mes 240 personas desaparecen en Bogotá, según las cifras oficiales. En un solo año se pueden reportar 3.077 personas desaparecidas en la ciudad, según cifras del Instituto de Medicina Legal.

Hoy, cuando el país está inmerso en los diálogos de la Habana (Cuba) y solo algunas de las víctimas han tenido voz, cobra importancia el testimonio de Gloria Luz Gómez Cortés, la hermana de Leonardo Gómez Cortés, un joven estudiante detenido y desaparecido en Bogotá en 1983.  La búsqueda de esta mujer por respuestas sobre las circunstancias en que despareció su hermano completa 32 años.

Su carta llegó a mi oficina en el concejo de Bogotá. Y no la puedo pasar por alto porque ella simboliza el drama que viven cientos de familias de la capital del país, que no es ajena al drama de los desaparecidos.

Gloria relata en su carta, que cinco años después también desapareció su hermano Luis Miguel Gómez. De ninguno de los dos se sabe cuál fue su suerte.

Como dice Gloria en su carga, sus hermanos, como miles y miles de colombianos y colombianas, fueron desaparecidos por soñar un país con justicia social y vida digna.

Pero no solo es el caso de Gloria. En Medicina Legal hay una romería diaria de personas buscando a sus familiares desaparecidos. Al menos días personas llegan a la morgue en busca de respuestas diariamente. Esperan encontrarlos, así sea muertos, para hacer el duelo. Pero no lo logran. Y solo les queda la esperanza de repartir carteles y volantes en las esquinas o pegarlos en los postes en busca de una información que nunca llega.

En Bogotá, por ejemplo hace dos años se registró la desaparición de Jessica Lorena. Tenía 18 años cuando su rastro se perdió. Sus familiares la vieron cuando salió a una fiesta en una casa vecina a su barrio, en Tibabuyes (Suba). Hasta hoy no se sabe nada de ella.

Muchas jóvenes desaparecen como parte del tráfico de personas, que seduce a hombres y mujeres con supuestos contratos de modelaje y empleo en el extranjero. Su rastro rara vez es encontrado por las autoridades. Y menos por sus familias, que jamás vuelven a ver sus rostros.

 

 

 

Logo de El Concejo de Bogotá en TV
El Concejo de Bogotá en TV

Logo de Sesiones del Concejo de Bogotá
Sesiones del Concejo de Bogotá

Logo de Qué pasó en el Concejo
Qué pasó en el Concejo

Logo de LSC
LSC

Logo de Audiencia Pública de Rendición de Cuentas
Audiencia Pública de Rendición de Cuentas

Logo de Ordenes al Mérito y Convocatorias
Ordenes al Mérito y Convocatorias

Logo de Transparencia
Transparencia

Logo de Gestion Pública Transparente
Gestion Pública Transparente

Logo de Bancadas Informales
Bancadas Informales

Logo de Sindicatos
Sindicatos

Logo de Intranet
Intranet

Logo de Directorio Telefónico
Directorio Telefónico