Las medidas tomadas por la alcaldía para la movilidad, frente a los 500 frentes de obra, no son suficientes y no representarán una mejora sustancial frente a las difíciles condiciones de movilidad que le esperan a la ciudad.
En Bogotá necesitamos un plan integral que incluya:
- Acuerdo de modificación de horarios con las empresas, universidades y el mismo servicio público.
- Acuerdo de teletrajo con entidades públicas, privadas y educativas.
- Plan de incentivos de vivienda cerca al lugar de trabajo.
Y bajo este panorama es incoherente el incremento en la tarifa del transporte público, cuando lo que se espera lograr es que muchos más gente opte por este sistema. Con este tipo de medidas, están llevando a los ciudadanos a buscar otros soluciones como un segundo automovil o el uso de motocicletas.
En conclusión, medidas como el ‘carro compartido’ o el pago de pico y placa solidario no son suficientes para desincentivar la compra de un segundo vehículo y si pueden llevar al traste la movilidad de la ciudad.