10.117 niñas y niños, de 2 a 6 años, dejaron de ser atendidos ayer en las Casas Vecinales de Bogotá por negligencia de la Secretaría de Integración. De igual manera 920 niñas, niños y preadolescentes no reciben atención, desde hace 4 meses, en los Centros Amar.
JUAN CARLOS FLÓREZ
“La administración dejó vencer los contratos de 97 casas vecinales en toda la ciudad, perjudicando a 10.117 niños y niñas en las localidades de: Usaquén (596 niños), Chapinero (84 niños), Santa Fe (336 niños), San Cristóbal (816 niños), Usme (1560 niños), Tunjuelito (277 niños), Bosa (1.551 niños), Kennedy (951 niños), Fontibón (82 niños), Suba (644 niños), Rafael Uribe (861 niños) y Ciudad Bolívar (2.359 niños). Desde hace cuatro meses 14 Centros Amar se encuentran cerrados, dejando sin atención a 920 niños y preadolescentes diariamente, afirmó Juan Carlos Flórez, de la Alianza Social Independiente.
"La administración dejó vencer los contratos de 97 casas vecinales en toda la ciudad, perjudicando a 10.117 niños y niñas en las localidades de: Usaquén (596 niños), Chapinero (84 niños), Santa Fe (336 niños), San Cristóbal (816 niños), Usme (1560 niños), Tunjuelito (277 niños), Bosa (1.551 niños), Kennedy (951 niños), Fontibón (82 niños), Suba (644 niños), Rafael Uribe (861 niños) y Ciudad Bolívar (2.359 niños). Desde hace cuatro meses 14 Centros Amar se encuentran cerrados, dejando sin atención a 920 niños y preadolescentes diariamente, afirmó Juan Carlos Flórez, de la Alianza Social Independiente.
Aunque la prioridad del plan de desarrollo Bogotá Humana es la atención integral a la primera infancia, después de siete meses de gobierno, la secretaría de integración no garantizó la atención con educación, alimentación y cuidado de los niños y niñas de 2 a 6 años, en las casas vecinales. ¿Qué piensa el señor alcalde mayor de esta grave situación?
La secretaría no renovó los contratos de las casas vecinales y dejó desamparados a infantes y padres de familia. Aunque el gobierno distrital sabía que los contratos se vencían el 30 de julio de 2012, cometió una grave negligencia al no tomar las medidas necesarias para garantizar la atención a niños y niñas. A pesar de la buena voluntad de las asociaciones comunitarias, éstas no pueden continuar prestando los servicios hasta que no se firmen los contratos, pues necesitan los recursos y garantías del distrito para operar. Las organizaciones que manejan las casas vecinales radicaron la documentación desde hace varios meses.
Al realizar una verificación en 68 casas vecinales, encontramos que 52 no prestan el servicio a los menores desde ayer, y a 55 asociaciones las mantienen bajo un manto de incertidumbre pues no han firmado contrato y no saben cuándo lo harán. Mientras este proceso se resuelve, los más afectados seguirán siendo los niños y sus familias.
Adicionalmente, desde el mes de junio de 2012 no se realiza la interventoria a la calidad de los alimentos que se les proporcionan a los niños en los jardines infantiles del distrito. Éste contrato también se dejó vencer.
Las Casas Vecinales son establecimientos que operan a través de contratos con Asociaciones Comunitarias, en los que la Secretaría de Integración Social aporta los recursos para su funcionamiento; en su mayoría, la planta física utilizada es de propiedad de la Secretaría.
Los Centros Amar, son instituciones para niños/niñas en situaciones especiales, hijos de recicladores que trabajan en la noche, trabajadoras sexuales o aquellos que requieran el servicio, buscando prevenir la explotación laboral, protegerlos y garantizarles sus derechos. Existían 17 Centros Amar ubicados en las localidades de Los Mártires, Suba, Usaquén, Engativá, Candelaria, San Cristóbal, Tunjuelito, Bosa, Usme, Kennedy, Chapinero, Rafael Uribe y Fontibón. Solo los tres últimos estan abiertos.