El Acuerdo 319, iniciativa del concejal Celio Nieves Herrera, tiene como objetivo prohibir en el distrito todas las actividades relacionadas con la reproducción, cría y comercialización de animales domésticos de compañía que sean portadores de enfermedades genéticas, congénitas, hereditarias y/o propias de su raza.
El 19 de noviembre de 2020, en sesión ordinaria de la Comisión Segunda Permanente de Gobierno, el Concejo de Bogotá aprobó en primer debate y de forma unánime los proyectos de acuerdo 318 y 319 de 2020, acumulados por unidad de materia, de autoría de los concejales Andrea Padilla Villarraga y Celio Nieves Herrera respectivamente.
Estos proyectos, producto del trabajo conjunto entre autores, ponentes y Administración, buscan prohibir la venta de animales vivos en plazas de mercado, regular las condiciones en las que se pueden comercializar animales domésticos en establecimientos de comercio, desincentivar la comercialización y reproducción de animales domésticos de compañía susceptibles de padecer enfermedades genéticas, congénitas, hereditarias y/o propias de su configuración racial, prohibir la comercialización de aves consideradas “ornamentales” en el Distrito Capital y promover campañas de transformación cultural para la protección de la vida animal.
“Se trata de una iniciativa que permitirá aflorar la sensibilidad de los seres humanos frente a los animales que, como seres sintientes, merecen medidas de protección que no solo estén justificadas en la protección de la salud humana, sino en la salvaguarda de su propio bienestar y en la lucha en contra del dolor y sufrimiento injustificados”, manifestó el concejal Nieves Herrera.
Para Celio Nieves, es crucial que la Administración Distrital adelante campañas de sensibilización y concienciación sobre las enfermedades genéticas, congénitas y hereditarias que sufren algunos animales y que les impide vivir en condiciones plenas de bienestar, con el propósito de desincentivar su reproducción y comercialización a partir de la realización de un estudio descriptivo que muestre la realidad en la materia. También señaló la necesidad de realizar consultas pertinentes a las entidades del orden nacional para que defina cuáles aves son consideradas “ornamentales” y de esta forma prohibir su comercialización en Bogotá. “Según la legislación colombiana, a los animales debe permitírseles manifestar su comportamiento natural; ¿qué comportamiento es más natural para un ave, que volar en libertad?”, enfatizó el autor Nieves Herrera.
No se vulnerará el derecho al trabajo de quienes se dediquen a estas labores económicas, pues el proyecto establece medidas de sustitución laboral a cargo de la Administración Distrital para salvaguardar el mínimo vital de esta población. El concejal Nieves Herrera puntualizó que es posible reconvertir estas actividades económicas y adecuarlas con los mandatos de protección y bienestar animal contenidos en la legislación colombiana.