El cabildante lamentó la ausencia de los representantes de los gremios de la construcción que igualmente estaban invitados para exponer su punto de vista sobre esta situación en la capital de la República.
Para el concejal Celio Nieves la autonomía y responsabilidad de los curadores en la expedición de las licencias de construcción no es suficiente garantía de la seguridad de las obras, ya que deben adelantarse controles durante todo el proceso y no solamente en los estudios y diseños; y dado que el marco legal y reglamentario de Bogotá no contempla la intervención de autoridades públicas para vigilar la calidad de materiales o procesos constructivos, la responsabilidad en las obras recae sobre los constructores como proveedores de bienes.
El cabildante hizo referencia a lo sucedido con el edificio Space en Medellín y calificó el hecho como una experiencia dolorosa para el país y una oportunidad para revisar la situación de Bogotá en procura de un control preventivo y no esperar a que un desastre nos sorprenda. Señaló que es peligroso desestimar el riesgo catalogando como leve lo que es grave y como grave lo que es gravísimo.
Por todo lo anterior, se solicitó a la Administración reajustar la normatividad distrital en lo pertinente al control urbano y fortalecer las sanciones por fuera de las normas urbanísticas y de edificación, al tiempo que solicitó ser rigurosos con la selección de los curadores exigiendo el cumplimiento de un equipo interdisciplinario que ejerza estricta verificación de los requisitos de los proyectos.
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