Teniendo como base la denuncia presentada el 18 de marzo pasado por la Concejal de Bogotá Lucía Bastidas, la Comisión de Regulación de Comunicaciones, CRC, inició la investigación administrativa contra Canal Capital tras el escándalo protagonizado por Carolina Sanín en uno de los espacios de la franja de opinión Mesa Capital, que centró su contenido en polémicas afirmaciones como “la droga es sexy, nos atraen las personas que consumen o el glamour que rodea la droga”, y otras más que hacían alusión al uso y consumo en horario prime familiar.
La solicitud a esta autoridad de televisión se dio luego de la emisión del programa Dominio Público que dirigía Sanín, en el que terminó afirmando también que: “La droga nos atrae tanto y nos parece seductora y prohibida, pero a lo que voy con todo esto es por qué nos hemos empeñado desde un punto en la historia de demonizarla y asociarla con lo demoniaco”, a lo que su invitado, le respondió: “Pues mira, lo de lo sexy es muy bonito porque la mayoría de sustancias disminuyen las barreras de interacción entre las personas y aumenta la libido”, y que fue visto por miles de televidentes el 16 de marzo a las 8:00 pm.
Por esta razón, la CRC determinó formular cargos contra el Canal porque habría podido incurrir en el incumplimiento de las disposiciones que regulan la emisión de contenidos aptos para todo público en Colombia. Considerando principalmente el artículo 2 de la Ley 182 de 1995, que se refiere a los fines del servicio de televisión para formar, educar, informar veraz y objetivamente y recrear de manera sana para promover los valores humanos.
Así mismo, el artículo 47 de la Ley 1098 de 2006 del Código de Infancia y Adolescencia, sobre la responsabilidad especial de los medios de comunicación, el cual señala que: “deben abstenerse de realizar transmisiones o publicaciones que atenten contra la integridad moral, psíquica o física de los menores, que inciten a la violencia, que hagan apología de hechos delictivos o contravenciones, o que contengan descripciones morbosas o pornográficas.”
Para la concejal Bastidas resulta cuestionable el manejo de esos contenidos al aire en un horario en el que la audiencia es todavía familiar, con mensajes que tienen un impacto negativo sobre los menores televidentes y que agreden a las familias víctimas de este flagelo. “Estamos hablando de un canal público que debe estar al servicio de la comunidad, y no usarse para favorecer los de quienes los dirigen o sus invitados. Son espacios pagados con recursos públicos, y resulta indignante que se tomen una hora completa para hacer promoción a favor de una problemática que ha azotado a nuestro país. Confiamos en que la investigación avance en favor de los bogotanos que esperan del canal público contenidos que hablen y aporten a sus necesidades reales en las 20 localidades”.