Los hechos por los que fue acusado Rivera, se remontan al 9 de octubre en el barrio Santa Catalina de la localidad de Kennedy, cuando roció con tiner a Laura Vanessa Rincón Álvarez y le prendió fuego después de una fuerte discusión, según las primeras versiones.
Laura, de 21 años, se encuentra en estado crítico en el Hospital Simón Bolívar, con más del 40 por ciento de su cuerpo comprometido con quemaduras de segundo grado. La acusación se dio el 11 de octubre, donde el juez después de estudiar el caso determinó una detención preventiva en el domicilio de su madre en Cajicá.
Por su parte, la concejal Lucía Bastidas quien conoció el proceso, manifestó que rechaza contundentemente y cuestiona la forma en que los jueces están midiendo la peligrosidad de un presunto agresor, e insiste que el aparato de justicia en Colombia debe ajustar sus trámites y procedimientos para garantizar los derechos de las víctimas, mayor y mejor acceso a la denuncia y las instituciones y que los victimarios no queden en la impunidad.
“Siempre exijo justicia, es este caso para Laura, una sentencia que se equipare al daño que sufre esa familia y reparación para los padres y para Laura. El hecho de que puedan ver una pena justa es lo mínimo que merecen y se abre una puerta de esperanza para cientos de hogares que cada año sufren esta tragedia por la violencia de género. No hay excusa, la justicia debe obrar en favor de las víctimas y no del victimario”.