#EstoyConEllas No más violencia contra las mujeres y niñas

Por: Angela Garzón Caicedo
Concejal de Bogotá D.C.
Partido Centro Democrático

La violencia contra las mujeres y niñas es una grave violación a los derechos humanos y es una grave problemática social, que ayuda a que no pueda existir efectivamente en nuestro país la equidad de género.

Pese a la existencia de un marco legal para proteger y penalizar la violencia contra la mujer, cada día aumentan más los casos de violencia, que ponen en evidencia que las acciones para combatirla deben ser reforzadas.

A decir verdad las estadísticas son preocupantes: solamente entre el 1 de enero de 2016 y el 5 de noviembre se han notificado al Sistema de Vigilancia Epidemiológica del Instituto Nacional de Salud 70.885 casos sospechosos de violencia de género, de los cuales el 76,8% tuvieron como víctima a una mujer. Esto quiere decir que 54.461 mujeres habrían sido agredidas en este año.

Colombia presentó ante la 118 sesión del Comité de Derechos Humanos de Naciones Unidas un informe que recibió algunas observaciones, especialmente respecto al hecho de que la violencia contra la mujer y violencia sexual "que afecta mayormente a mujeres y niñas, continúan representando serios problemas tanto dentro como fuera del marco del conflicto armado", así como que se evidencia que existen altos niveles de impunidad por estos delitos.

Adicionalmente, llamó la atención sobre la necesidad de que se facilite la presentación de denuncia por parte de las víctimas y que haya investigación y sanción de manera exhaustiva e imparcial, con el fin de lograr atención, reparación y protección adecuada en el país. Debemos dejar el enfoque de violencia contra la mujer como un asunto de familia o problemas de pareja, y debemos trabajar para garantizar el acceso a la justicia, para que las mujeres que son agredidas sientan confianza en denunciar y se atrevan a pedir ayuda.

ONU Mujeres señala que en el mundo 1 de cada 3 mujeres ha sufrido violencia física y/o sexual por parte de su pareja o violencia sexual por parte de un tercero en algún momento de su vida. Lo más doloroso es que en muchas ocasiones este tipo de agresiones tienden a repetirse, especialmente cuando se habla de violencia de la pareja, donde entran a jugar aspectos como el miedo, el qué dirán o el sometimiento por temas económicos.

La violencia contra la mujer no distingue niveles sociales, aunque las cifras que se reportan de agresiones sean más altas en la población de bajos ingresos, donde factores como la baja escolaridad, el maltrato infantil, un entorno de violencia intrafamiliar en la infancia, el uso de alcohol u otras sustancias psicoactivas, las desigualdades de género o el embarazo adolescente no deseado pueden agravar la situación.

Quizá nunca antes habíamos tenido tanta información relacionada con la violencia contra las mujeres; en un 20% han aumentado las denuncias penales por violencia intrafamiliar en lo corrido de 2016 según lo informa la Fiscalía General de la Nación, en donde hay 85 mil procesos vigente; y en Bogotá, El Instituto de Medicina Legal ha practicado 1.793 exámenes médico-legales en mujeres por el delito de violencia sexual.

Según la misma institución, las localidades con mayor número de casos de agresiones contra las mujeres son Kennedy, Suba, Bosa y Ciudad Bolívar, pero llama la atención que el 68.6% de los casos de violencia sexual se presentaron en el lugar de residencia de la víctima.

Más preocupante aún es que cada 12,5 Minutos una mujer es víctima de violencia de pareja y cada 27 minutos una mujer es víctima de violencia sexual, según SISMA mujeres.

En nuestras manos está hacer aún más visible este flagelo, ya que no se puede permitir que ocurra en un país que avanza hacia el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, uno de los cuales es, precisamente, "lograr la igualdad entre los géneros y empoderar a todas las mujeres y las niñas"

Este 25 de noviembre es el Día de la No Violencia contra la Mujer y queremos invitarlos a sumarse a esta iniciativa, a actuar YA contra la violencia contra las mujeres y niñas. No queremos más agresiones, no queremos una sociedad que se vende los ojos ante una situación que demostraría que en vez de avanzar, retrocedemos en respeto, tolerancia y ciudadanía.

Este causa para mí es más que un compromiso como Concejal de la ciudad: es un compromiso de vida. Una de las personas más importantes de mi vida, mi hermana mayor, Jenny Garzón Caicedo, fue asesinada hace 16 años, cuando tan solo tenía 27 años de edad.

El dolor que produce perder a alguien que amas es muy grande, pero también es el motor para ayudar a que ninguna otra mujer sea agredida.

No pensemos que estas situaciones son solo cosas que vemos en las noticias, que solo le pasan a extraños y que jamás viviremos una situación así.

Hoy son otras las agredidas, mañana puedo ser yo, o alguien de nuestra familia, cono es mi caso, entonces, usemos los medios a nuestro alcance para crear constancia sobre la necesidad de eliminar todo tipo de violencia, especialmente aquella contra las mujeres y niñas.

25 de noviembre de 2016