Estructura ambiental propuesta en el Plan de Ordenamiento Territorial garantiza inclusión
¿Hundir, negar o enriquecer el POT?
Concejal Hosman Yaith Martínez apoya a la Administración en la tarea de entregarle a Bogotá una herramienta normativa que ponga orden al territorio y garantice el crecimiento responsable, ordenado y sostenible que conlleve al desarrollo de la capital en defensa de nuestros ecosistemas.
La estructura ambiental propuesta en el POT es idónea para evitar el agotamiento, contaminación y degradación de los patrimonios ambientales existentes en la ciudad. La capital no puede continuar expuesta a la vulnerabilidad territorial que genera el cambio climático y debe contar con garantías de protección y mejorar la calidad de vida del ser humano con el aprovechamiento de los espacios naturales.
Las restricciones urbanas para las zonas que tienen amenaza alta y media son indispensables para evitar las frecuentes inundaciones y remoción en masa que se presentan en zonas de riesgo por fenómenos climáticos. La ola invernal deja aproximadamente 6.000 damnificados cada año.
Más de 500 hectáreas estaban destinadas para la expansión urbana y con la actual modificación el suelo se mantendrá como rural para la producción agropecuaria y protección ambiental. Modificación contemplada en el artículo 116, "condicionamientos para adelantar procesos de urbanización". También plantea mecanismos para aumentar la permeabilidad y capacidad de infiltración del agua en el suelo urbano, como la restricción de nuevas actividades mineras en defensa de la salud y protección hídrica.
Bogotá debe dejar de ser irresponsable al entregar suelos que ponen en riesgo la vida, dignidad y seguridad de los ciudadanos. "Toda persona sueña con tener una casa propia, no es justo jugar con la población vulnerable, ellos también tienen derechos y es responsabilidad nuestra garantizar la protección de la vida humana". Afirmó, el concejal Hosman Yaith Martínez.
La ciudad necesita una norma que articule y brinde herramientas a las autoridades Distritales y locales para implementar proyectos urbanísticos que han estado detenidos a falta de una medida que garantice orden, inclusión y protección.
Llegar a un punto de equilibrio entre todos los grupos poblacionales es una tarea compleja, más no imposible. Es deber de la Administración Distrital y el Concejo de Bogotá generar modificaciones y consensos que enriquezcan el Plan de Ordenamiento Territorial.
Invito al Alcalde Mayor de Bogotá, Gustavo Petro y al Concejo de Bogotá para que juntos mejoremos lo propuesto por la Administración en dirección de servir a los ciudadanos y construir una ciudad habitable, digna y segura. No debemos olvidar que el POT es una herramienta normativa que requiere la capital y es deber nuestro entregar un buen Plan de ordenamiento Territorial pensando no sólo en el presente, sino en las futuras generaciones que ocuparán el territorio.
"Los cuestionamientos, imprecisiones e interrogantes que genera el POT en las instituciones y cabildantes deben llevar a la construcción y perfección de la propuesta modificatoria. Debemos entregar un Plan de Ordenamiento Territorial realista y no idealista" Aseguró el cabildante.