Grandes noticias para 1.462.779 bogotanos que se verán beneficiados con troncal de la Avenida 68. El día de ayer, se conoció que el juzgado administrativo 49 de Bogotá ordenó el levantamiento de las medidas cautelares impuestas el pasado 20 de agosto, por lo cual se puede reanudar los trabajos de tala y reubicación de árboles de la obra.
El juzgado administrativo 49 de Bogotá había ordenado en agosto la medida cautelar que impedía la construcción de la troncal de TransMilenio por la Av. 68, señalaba que "Toda actividad que involucre la tala de árboles, traslado, afectación al suelo, afectación a cuencas hidrográficas” quedaban suspendidas.
Por fortuna el día de ayer el mismo juzgado emitió un nuevo auto a través del cual levanta dicha medida cautelar, además aclaró que no concederá recurso de apelación. Según el IDU la defensa ante la autoridad judicial se basó en considerar que los actos administrativos que autorizaban el tratamiento silvicultural (tala, bloqueos y traslados) ya habían sido sustituidos por la Secretaría Distrital de Ambiente, además tuvieron una variación en el tratamiento que permitía reducir en 32.17% la tala de árboles.
La reanudación de los tratamientos previstos permite que la obra avance aún más rápido, aunque los contratistas de los nueve tramos del proyecto, continuaron con las actividades propias de la ejecución de cada uno de los contratos asociados, que no implican una afectación desde el componente ambiental, forestal y fauna, como informó el IDU.
La mega obra no solo contará con espacio público verde, sino que será triplicado con relación al existente, tendrá grandes beneficios para la movilidad de la ciudad (1.462.779 ciudadanos beneficiados directamente y más de 5 millones indirectamente). Finalmente, las compensaciones que, en materia ecológica y ambiental, tendrá la obra una vez finalizada, superando ampliamente el número de árboles existentes antes de iniciarse la obra (3.598) frente a los que habrá al terminarse el corredor (4.718).
Con esta decisión gana el desarrollo de la ciudad, la movilidad, el ambiente y todos los bogotanos. Esperemos que estas actuaciones de frenar las obras por medio de demandas, acciones populares y demás recursos deje de ser utilizado en beneficio de la ciudad.
