La inseguridad en el transporte público de Bogotá no es percepción, los indicadores reportados por la Secretaría de Seguridad evidencian que durante el primer semestre de 2022 se reportaron 11.349 delitos cometidos en estaciones de Transmilenio, buses alimentadores y buses troncales. Al comparar el primer semestre de 2021 y 2022 la cifra aumentó en 36,32%, el hurto a personas se incrementó en un 34,67%. En las estaciones predomina este delito con 2.461 denuncias que aumentaron en un 42.1%. Seguido por los buses troncales con un crecimiento de 58,6%
Los recientes casos se relacionan con mujeres que han sido violentadas hasta llegar el punto que a una de las víctimas la arrastraron del cabello hasta la puerta en la estación de la calle 142 y el atraco ocurrido en un articulado de Transmilenio el 7 de septiembre en el que varias mujeres fueron golpeadas para entregar sus pertenencias. El hurto a las mujeres dentro del sistema se presentó principalmente en modalidad cosquilleo con 1.372 denuncias, seguido por “raponazo” con 806 y atraco con 704.
En el transporte interurbano e intermunicipal de pasajeros los delitos ocurren principalmente en paraderos de buses y terminales de transporte. Durante el primer semestre del 2022, la cifra ascendió a 1.696 reportes. Con respecto a 2021 el robo de celulares aumentó 25,5%, el hurto a personas 23,1% y las lesiones personales 100% en paraderos de buses. Las mujeres son las más afectadas con una variación porcentual del 87,3%, pasando de 102 a 191 casos.
A diario la seguridad empeora en los entornos del transporte público y una de las mejores opciones para contrarrestar esta situación es la propuesta del Ecosistema de Seguridad en la que he insistido al Distrito. A través del uso de la inteligencia artificial se debe recopilar información que motive y permita focalizar la intervención con policía y ejército en aquellos puntos en los que el crimen opera con mayor frecuencia. Cabe recordar que la Personería reiteró al C4 que debe avanzar en la compatibilidad de las cámaras del Sistema toda vez que ya se cuenta con más de 31 mil dispositivos ubicados al interior de los buses.
Esta propuesta se debe acompañar con una estrategia que busque terminar con las ventanas rotas en los entornos del transporte público, reponer luminarias, reparar puertas vandalizadas, recolección de basuras en inmediaciones de las estaciones, aseo y limpieza de todo el sistema.
