Las afirmaciones fueron hechas en el marco de un debate de control político citado por el Polo Democrático Alternativo, por iniciativa del Concejal Nieves Herrera, que buscaba hacer un seguimiento al Consejo Distrital de Paz y los Consejos Locales de Paz.
El Consejo Distrital de Paz es un organismo con participación de la sociedad civil que tiene como principal función asesorar al gobierno distrital en materia de política de paz. Este espacio de interacción entre la ciudadanía y administración permitiría la construcción conjunta de procesos para la construcción de paz, la defensa de los Derechos humanos y la implementación y construcción de la política de paz.
Nieves Herrera mencionó tres hechos recientes ocurridos en la ciudad denotan la importancia que tienen los espacios como el Concejo Distrital de Paz y la necesidad no solo de ponerlos en funcionamiento, sino de mantenerlos activos a través del tiempo.
El primer acontecimiento fue el informe de la Personería de Bogotá sobre los Indicadores de Goce Efectivo de Derechos de las Víctimas (IGED), que evidenció que la situación actual de las víctimas en la ciudad es dramática. Por ejemplo, según el informe solo el 23% de las víctimas que viven en Bogotá habitan una vivienda con condiciones dignas y solo el 35% ha podido superar la línea de pobreza.
El segundo hecho es la Alerta Temprana de la Defensoría del Pueblo que llama la atención por presencia de estructuras armadas ilegales en tres localidades de la ciudad (Bosa, Kennedy y Ciudad Bolívar). Esta alerta consigna que dentro de la población en riesgo se encuentran población víctima del conflicto armado, así como sus líderes y lideresas.
Por último, señaló la preocupación que genera casos de homicidio en donde los cuerpos de las víctimas son descuartizados y que recuerda la sevicia con la que grupos armados, especialmente los paramilitares, operaron en el país.
Para el Concejal del Polo, el Consejo Distrital de Paz, al convertirse en una herramienta de interacción entre los actores sociales y el Gobierno Distrital, permitirá conocer con prontitud situaciones como las que dieron origen a las alertas tempranas por parte de la Defensoría del pueblo. Con este conocimiento, recibido rápidamente por parte de la misma comunidad, se habría podido responder oportunamente desde el Distrito, sin tener que esperar el llamado de alerta de otro tipo de entidades.
Así mismo, explicó Nieves Herrera, el Consejo debe ser el lugar donde los actores sociales y todos los actores institucionales (nacionales, territoriales, distritales) construyan sinergias que permitan que las respuestas a las problemáticas sean más eficientes y eficaces, evitando la desarticulación y creando una línea de acción clara.
Bogotá necesita abrir los espacios que permitan crear estrategias para fortalecer la cultura y la formación educativa para la paz: el Consejo de Paz es vital para este fin, por lo que pide al gobierno de Enrique Peñalosa convocarlo con urgencia.
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