Cada día es más desalentador el panorama que viven millones de mujeres en Bogotá. Entre 2015 y 2018, el total de casos de violencias aumentó en 1.565, siendo las mujeres las principales víctimas de violencia física, y aunque los feminicidios, entendidos como muertes violentas de mujeres en relación de su género, han disminuido en los últimos años, persisten otras formas de violencia.
Es así como, por ejemplo, Medicina Legal reportó en el último año más de 27.585 casos de violencia física contra las mujeres en Bogotá. La violencia física de pareja tiene la mayor proporción de casos en relación con el total (37.6%), seguida de la violencia interpersonal (33.9%). En el 2019, se presentaron 260 Feminicidios en Colombia, y lo que va corrido del año 2020, con una cuarentena que se extendió por más de cinco meses, ya contamos 181 feminicidios, de los cuales 13 se han reportado en Bogotá y otro más reciente e igual de violento en Soacha este fin de semana, el de Sandra Milena Saldaña, de 25 años apuñalada con un destornillador a manos de Miguel Alfredo Arenas quien es buscado por las autoridades. Sin duda, una pandemia silenciosa que pone en riesgo la vida de las mujeres, incluso dentro de sus propios hogares. El tipo de violencia que más se ha reportado es la psicologica con un 49%, seguida de la violencia física con un 28% y violencia económica con un 16%.
Casas Refugio intermedias para las mujeres de Bogotá
Desde hace casi seis meses he vendido impulsando el proyecto de Acuerdo Distrital No. 112 de 2020 “Por el cual se implementa una medida intermedia en las Casas Refugio, para la atención a las mujeres con riesgo medio y alto de feminicidio”, esto con el fin de darle acogida al grupo de mujeres en riesgo que desisten del modelo tradicional de Casas Refugio.
Actualmente, las Casas Refugio, responden a un proceso de atención psico-social y socio jurídica que brinda acogida a las mujeres víctimas de violencia de acuerdo a la Ley 1257 de 2008, quienes llegan con su sistema familiar, en virtud de una medida de protección por un período de permanencia gratuita hasta por cuatro (4) meses. Así también, a mujeres víctimas de violencia en el marco del conflicto armado, según la Ley 1448 de 2011, quienes llegan con sus familiares y son remitidas por una de las entidades del Sistema Distrital de Víctimas por un período de permanencia gratuita hasta por un (1) mes.
Tras siete años de implementación del modelo de Casas Refugio, la Secretaría Distrital de la Mujer analizó los retos en la atención y protección de las mujeres víctimas de violencias, estableciendo, entre otros, la necesidad de complementar el sistema actual con una modalidad intermedia de acogida que responda a las necesidades de las mujeres víctimas de violencias que se encuentren en riesgo y que por sus características específicas no quieren o no pueden ingresar al modelo actual por el tipo de restricciones que les representa. De esta manera, nuestra propuesta fue acogida y aprobada en el Plan de Desarrollo Distrital 2020-2024, con una meta estratégica de ampliar a seis el modelo de operación de Casas Refugio en la ciudad, para la protección de la vida y la integridad de las mujeres y sus sistemas familiares, priorizando la ruralidad y una modalidad intermedia.
Esto requiere, básicamente, comprender el piloto de la modalidad desde la flexibilidad, donde las mujeres acogidas en este esquema, estén en el centro del diseño de la modalidad intermedia de acogida, garantizando su derecho a estar informadas, a su autonomía y dignidad, donde se les permite trabajar, estudiar y salir de la casa con medidas de protección de acuerdo a su situación. Es así, como se implementó un primer piloto desde el 28 de julio hasta el 21 de agosto de 2020 que brindó alojamiento y alimentación gratuita a 17 mujeres víctimas de violencias y 28 hijos e hijas, para un total de 45 personas.
La modalidad intermedia de acogida busca la estabilización emocional de la mujer, la identificación de sus necesidades, la búsqueda de sus redes de apoyo familiar o social y brindarle información clara y oportuna sobre sus derechos, procedimientos y rutas. En consecuencia, una vez las mujeres víctimas de violencia son alojadas con su sistema familiar, la Secretaría Distrital de la Mujer a través de los servicios de asesoría realizan una primera intervención dirigida a identificar sus necesidades de acompañamiento para que luego, al salir de la Casa Refugio, la mujer de su consentimiento para que los equipos de la Secretaría Distrital de la Mujer realicen seguimiento telefónico por un mes más con independencia del tiempo que estuvo alojada para que se sienta segura y continúe su proceso de protección.
Actualmente, esta entidad analiza y recoge las buenas prácticas y aprendizajes que surgieron con la implementación de este piloto, con el fin de definir los ajustes y mejoras que permitirán consolidar la versión definitiva del modelo intermedio de acogida de Casa Refugio, lo que se convierte sin lugar a dudas en un gran avance en Bogotá para la protección de las mujeres, para que cada vez más acudan con seguridad a los servicios creados para su protección sin pensar que su vida se detiene con ello, y que puedan además salir con mayores y mejores herramientas para reanudar su vida lejos del peligro y superando la violencia que las acecha. #NiUnaMás
Concejal de Bogotá
