Participaron los principales expertos del país en el tema, quienes coincidieron en  la necesidad de abolir el castigo físico de las prácticas de crianza y educación. Sostuvieron igualmente que es una  obligación del estado colombiano  el de asumir desde  la legislación del país,  el compromiso de erradicar el castigo  físico.

Entre los foristas estuvo la doctora Isabel Cuadros, médica psiquiatra, pionera desde hace 20 años en el tema de maltrato infantil en Colombia  y directora de la Asociación Afecto. Según la doctora Cuadros, es  necesario llevar el estado de derecho al hogar, lugar donde más se vulneran los derechos de los niños y niñas. "El estado debe  comenzar campañas para orientar a los padres, debe educarlos para  cambiar los comportamientos y hábitos de educación violentos" afirma la directora de Afecto. De la misma manera, invita a todos los padres a cerrar los ojos  por un momento y recordar que sentían cuando eran niños y los golpeaban. La doctora Cuadros afirma: "Los golpes dejan marcas y resentimientos para toda la vida".

Por la Universidad Nacional estuvo el antropólogo y doctor en Sociología, Fabián Sanabria, quien cree que la abolición del castigo físico no sólo debe  pasar por el ordenamiento jurídico del país, sino que necesariamente debe  haber un cambio cultural en las prácticas de crianza. El doctor Sanabria  afirma que el castigo físico  genera resentimiento y miedo. Si un niño es maltratado, golpeado e insultado no es gratuito que ese sujeto maltrate golpee e insulte en su vida adulta, afirma el experto en ciencias humanas. Su propuesta es sustituir la violencia física por  la violencia simbólica.

También  estuvo como forista el doctor Franklin Escobar, psiquiatra de la Universidad Nacional y con doctorado en Medicina de la Universidad de la Plata, Argentina. El doctor Escobar se ha especializado en el estudio del comportamiento  de psicópatas y homicidas. En su intervención presentó un estudio realizado con homicidas juveniles para el cual se utilizó la muestra más grande en el mundo en este tipo de estudios. Una de las conclusiones del estudio y el mensaje que dejo el doctor Escobar es que el castigo físico severo es un factor de riesgo muy alto en las causas que determinan los comportamientos psicópatas y homicidas. De acuerdo con esta investigación, un niño que ha recibido castigo físico tiene 460 por ciento más de  posibilidades de convertirse en homicida que un niño que no haya sido maltratado.

Asistió igualmente el médico pediatra Sergio Isaza, quien afirma que en la educación se debe cambiar los métodos correctivos de violencia por afecto, paciencia, imaginación, persistencia y claridad acompañada de  firmeza. Los padres deben tener muy claro hacía donde quieren guiar a sus hijos. El doctor Isaza recalcó que uno de los elementos fundamentales en la crianza, sobre todo en la primera infancia, es el ejemplo, los niños en los primeros años son repetidores de todo lo que ven y por esta razón es fundamental el ejemplo que un padre les da a sus hijos. Así mismo afirma que la legislación colombiana todavía es muy ambigua  en cuanto a la protección de los niños, razón por la cual se necesita  una norma que de forma explícita prohíba el castigo físico en cualquier escenario. "El castigo físico sólo reproduce la violencia que vive el país", afirma el doctor Isaza.

UNICEF estuvo representada por la abogada Rocío Mojica, quien participó con el impulso a la reforma de la legislación sobre niñez en Colombia. Tiene más de 15 años de experiencia de trabajo en el tema.  La propuesta de la doctora Mojica apunta a que es necesario trabajar en un cambio de concepción en las formas de educar para que las familias, las instituciones educativas y las comunidades en general, reconozcan a sus niños, niñas y adolescentes como sujetos, reconozcan su aporte en los procesos de desarrollo comunitario y social. La representante de UNICEF afirma que se hace  necesario una crianza y una educación que permitan la construcción de autonomía, la formación de seres humanos con criterio, con claridad sobre sus derechos y sobre el respeto a los derechos de los demás, con capacidad de respetar la diferencia,  con capacidad de decir no a la violencia y a la arbitrariedad.

El Foro lo cerró el psicólogo Roger Dávila, actual coordinador de Protección Programa Colombia en Save The Children. "Si es posible educar sin golpes", sostiene el doctor Dávila quien también afirma que el castigo corporal es una forma de violencia aceptada socialmente y es el primer paso para que un niño sea quemado, ahogado, pateado o cualquier otro tipo de castigo brutal. Para el representante de Save the Children  si se eliminan los castigos corporales nunca se cruzaría esa barrera y la violencia intrafamiliar disminuiría.  El doctor Dávila agrega que es importante trabajar en el cambio de  los patrones culturales que aceptan el castigo físico,  al tiempo que el país se pone al día en su legislación frente a este tema.

La Concejala Martha Ordóñez afirmó que este foro es  el inicio de un cambio cultural que se debe dar en la crianza de la infancia en Colombia. "Los niños y niñas necesitan crecer en un ambiente sano, cuando se les castiga se afecta su derecho a una vida digna y libre de violencia", concluyó la concejala.  Invitó a toda la sociedad a unirse a todos los padres y responsables de la crianza y educación en el país: "nada justifica maltratar a un niño o una niña, pasa la bola no más castigo físico"