Peñalosa incumple con las viviendas para las víctimas
El 65,7% de las víctimas en Bogotá no tiene vivienda asegurada, según el DANE. En 2017, sólo 29 hogares de víctimas han accedido a crédito para vivienda. Estos son unos ínfimos resultados tras dos años de gobierno de Enrique Peñalosa.
La secretaría de hábitat tiene una pésima gestión de sus recursos y metas de inversión
La secretaría de hábitat tuvo un presupuesto de inversión de $211.777 millones en 2017. Estos recursos representan el 94,3% de su presupuesto total para el año. De la misma forma, la secretaría sólo ha hecho giros efectivos de $34.242 millones, que representan el 16,1% del presupuesto de inversión (las cifras provienen del Predis de la secretaría de hacienda, con corte a 30 de octubre de 2017).
En la siguiente gráfica pueden ver estas cifras. En color azul está representado el presupuesto de inversión de la secretaría, y en rojo el porcentaje que efectivamente fue ejecutado. Es una fracción muy pequeña, que plantea serias dudas sobre la gestión de un sector fundamental para la disminución de la desigualdad en Bogotá.
La secretaría de hábitat tampoco cumple metas en viviendas de interés social, y este no es un problema nuevo. En la discusión del presupuesto para 2017 mostré que las metas de construcción de vivienda que contiene el plan de desarrollo no son claras. Por una parte, la meta es construir 80 hectáreas útiles para vivienda de interés social. Sin embargo, no hay claridad sobre el número de viviendas que están en construcción o sobre las que serán construidas este año.
En la siguiente tabla pueden ver los datos de cumplimiento de metas de vivienda que la secretaría reportó a segplan, con corte a septiembre 30 de 2017. En la primera fila vemos la meta de conseguir las 80 hectáreas: la secretaría había conseguido 35,83 hectáreas de las 80 que habían planeado (44,7%). Para esta meta, la secretaría comprometió $763 millones de los $1.967 millones que tenía disponibles (compromisos de 38,8%). Para el próximo año, la secretaría pide $1.808 millones (que representa una reducción de 8%).
Estas hectáreas están ubicadas, según el reporte de segplan, así:
0,205 ha P. Britalia (declaratoria), Suba.
0,09 ha PA. Torres de SOHO, Kennedy.
0,04 ha PA. Quinta Colon, La Candelaria.
0,14 ha Urb. Andes, Barrios Unidos.
0,26 ha Urb. Remanso de la Colina, Suba.
0,06 ha P. Congregación de los Misioneros de Mariannhill, Bosa.
0,22 ha PA. San Gualoche, Bosa.
0,04 ha P. Carrera 18, Teusaquillo, destinado para equipamientos colectivos.
0,95 ha P. Senderos de la Sierra, Usme.
0,49 ha PP. Sabana UG1, Los Mártires.
17,35 ha PP. Tres Quebradas UG1 Etapas 1, 2, 3.
7,17 ha PP Procables UG 1 Etapas 1, 2, y 3.
0,052 ha predio AAA0101ACTO proyecto Prado Suiza.
0,15 ha predio AAA0053ZCBS proyecto Predio Villamizar.
0,08 ha Proyecto Primera de Mayo la Llanura.
0,03 ha proyecto la Belleza.
1,52 ha Urbanización las Margaritas.
0,2 ha Urbanización Parques de Bosa.
0,63 ha predio AAA0031SACX, Santa Fé, edificio de 95 pisos.
0,14 ha predio AAA0029XLXS Santa Fe, edificio 169 viviendas multifamiliares y comercio.
5,92 ha que gestionaron en 2016
Pero este progreso en hectáreas no es consistente con la meta de construcción de viviendas de interés social iniciadas que aparece en el plan de desarrollo. De la meta de 60.000 viviendas de interés social para el cuatrienio, a septiembre 30 se habían concretado 19.015, según segplan. Esto equivale a un 31% de la meta cumplida, cuando ya vamos a llegar al 50% del periodo de gobierno.
Además, el aumento del presupuesto para esta meta es ínfimo: pasa de contar con $2.093 millones en 2017 a tener $2.270 millones en 2018 ($177 millones más, que representan un incremento de 8,4%).
El programa de vivienda para las víctimas es un crédito de difícil acceso y condiciones muy estrictas
En el anexo 4 del proyecto de presupuesto, la secretaría de hábitat reporta que de los 500 hogares de víctimas que debían atender, 495 hogares fueron beneficiados o tuvieron cupos garantizados en el programa integral de vivienda efectiva, PIVE (cifras con corte al 31 de agosto de 2017). No explican la diferencia entre un hogar beneficiado y un cupo garantizado. Como veremos, estos términos no necesariamente son equivalentes.
¿Cuántas víctimas necesitan vivienda en Bogotá? Hicimos un estimado. De acuerdo con los datos de la encuesta de goce efectivo de derechos del Dane (de 2014), que es el último reporte estadístico oficial de la situación de las víctimas del conflicto en la ciudad, y el registro de víctimas de la unidad nacional de víctimas para este año, tenemos que:
En Bogotá viven 679.267 personas registradas como víctimas.
De ellas, 529.148 víctimas (el 77,9%), no tienen acceso a una vivienda en condiciones dignas en Bogotá.
Además, 446.278 víctimas (el 65,7%) no habitan en vivienda propia ni tienen contrato de arrendamiento, es decir, no tienen vivienda asegurada.
Hacia esta población va dirigido el PIVE. Este programa cuenta con dos fuentes de financiación: un proyecto de cierre financiero del distrito y un acuerdo de leasing habitacional financiado por el fondo nacional del ahorro. Este proyecto tiene en cuenta la vida crediticia y la capacidad de endeudamiento de los beneficiarios. Las víctimas no están en situación de cumplir con los requisitos que establece el sistema financiero para acceder a créditos.
Esto se comprueba con las cifras que presenta la secretaría de hábitat. Según el anexo 4, de los 495 hogares beneficiados con el PIVE, sólo hay 29 beneficiarios reales de las modalidades establecidas por el programa: 26 por leasing habitacional y 3 con cierre financiero. Las demás familias hacen parte de un programa de acompañamiento que les brinda información para hacer las gestiones necesarias para acceder a los programas de vivienda.
Fuente: Anexo 4, proyecto de acuerdo 636 de 2017.
Estas cifras son diferentes a las que entregó la secretaría de hábitat el 27 de octubre de 2017, luego de que solicité información adicional sobre el PIVE. Según estas respuestas, por cierre financiero se han beneficiado 274 hogares víctimas y por leasing habitacional, hay 250 hogares destinados para víctimas. ¿En que radica esta abrupta disparidad en las cifras?
Además, según la guía de información básica del PIVE, publicada en la página web de la secretaría de hábitat, el programa sólo aplica para vivienda de interés prioritario cuyo valor comercial no sea superior a 70 salarios mínimos mensuales ($51.640.190). El programa ofrece dos beneficios: apoyo monetario para el pago de las cuotas del leasing habitacional y un acompañamiento social, dirigido a la formalización de los hogares. Tampoco sabemos en qué consiste esta formalización.
En esta guía, la secretaría hace dos aclaraciones muy importantes: (i) que el PIVE no es un programa de vivienda gratuita, pues define un canon de arrendamiento que se debe cumplir durante tres años para poder acceder a los beneficios del programa; y (ii) que en caso de que una familia beneficiaria falle con una sola cuota de este leasing, automáticamente tendrá que devolver la vivienda. Las cuotas que se deben pagar son de $150.000. Pueden ver a continuación un pantallazo de la página de la secretaría de hábitat (tomado el 1 diciembre de 2017), que explica estas condiciones.
Además de estas condiciones, se van a reducir los recursos destinados a garantizar que las víctimas accedan a una vivienda. La secretaría de hábitat canaliza recursos para la atención de víctimas desde el proyecto de inversión de "estructuración de instrumentos de financiación para el desarrollo territorial". Para el 2017, este proyecto contaba con $34.305 millones de los cuales $11.439 millones se destinaban a las víctimas. El próximo año, este proyecto tiene un presupuesto de $23.639 millones, de los cuales $10.031 serán exclusivamente para esta población. Esto significa que los recursos para las víctimas tendrán una reducción de $1.408 millones para el próximo año (12,3% menos).
En vez de viviendas, ¿pintar fachadas?
La secretaría de hábitat, con el apoyo de la fundación Orbis (del grupo Orbis, dueño de Pintuco), ha realizado tres intervenciones en barrios populares en las localidades de Rafael Uribe, Santafé y Usaquén. El pasado 25 de noviembre presentaron el mural en el barrio Buenavista, en la zona nororiental de la ciudad.
Esta es una iniciativa interesante para generar un sentido de pertenencia en los habitantes del barrio y para crear una nueva experiencia estética en su vida cotidiana. Sin embargo, la realización de estos murales en barrios populares no puede reemplazar la construcción de viviendas dirigidas a los habitantes más pobres de la ciudad que, como mostré, está muy rezagada.