Cada día generamos millones de residuos por los productos que consumimos, ejemplo de esto son las colillas de cigarro y las gomas de mascar, que constantemente son tirados al suelo, desconociendo que estos residuos pueden convertirse en insumos para producir otros elementos, por eso en Bogotá es necesario incentivar los emprendimientos que se basan en economía circular, más aun cuando en la ciudad se generan 324 toneladas de colillas de cigarro al año y de acuerdo con un estudio de la Universidad Piloto 94,9 millones de colillas de cigarrillo son arrojadas anualmente sobre el espacio público
Es necesario fortalecer la correcta disposición e este tipo de residuos y también plantear alternativas para darles una segunda vida dado que al ser arrojadas a los suelos, llegan a las alcantarillas y afectan recursos hídricos como el Río Bogotá. Las colillas, por ejemplo, contienen hasta 400 sustancias tóxicas, están hechas de acetato de celulosa y tardan en degradarse hasta 10 años.
Existen iniciativas en diferentes lugares del mundo para reciclar y reutilizar las colillas de cigarro y gomas de mascar. En el caso de Uruguay, se ha apoyado desde las entidades contar con mobiliario para que los ciudadanos hagan separación de colillas y gomas de marcar y así los encargados puedan hacer la transformación en materia prima.
Por otra parte, una investigación de la Escuela de Ingeniería de la Universidad RMIT (Melbourne, Australia) informó que, si en la producción de ladrillos se incluyen los filtros de las colillas de cigarro, los gastos en la cocción se pueden reducir, pues la temperatura necesaria para un ladrillo sería menor gracias al acetato de celulosa de los filtros de cigarrillos. Adicionalmente, los investigadores afirman “el 2.5 por ciento de los ladrillos que se fabrican anualmente incluyeran el 1 por ciento de las colillas, se podrían reciclar todos los filtros”.
Así entonces, con ejemplos como este impulsamos proyectos desde el Concejo de Bogotá para apoyar la reutilización y la buena disposición de estos residuos. Entidades como la Secretaría Distrital de Ambiente y la UAESP pueden articularse para incentivar a las ladrilleras a usar los acetatos de celulosa de los cigarros como insumo para producirlos y al reutilizar residuos en cadenas productivas se reduce el consumo energético lo cual, es uno de los objetivos de económica circular.
Lo mismo ocurre con las gomas de mascar, residuos que tiene potencial en convertirse en plástico para hacer canecas como hacen en México D.F y en Londres, bajo el programa Anna Bullus en el que se ha logrado transformar las gomas de mascar en vasos de café.
Se requiere esfuerzo institucional para coordinar esfuerzos entre el sector privado y público, aun no hay certeza de la posible resolución que expediría la Secretaría para establecer zonas libres de humo y de colillas de cigarrillo, tabaco, picaduras y sus derivados, se adoptan medidas restrictivas en la disposición de colillas de cigarrillo.
Esta realidad ambiental muestra el impacto que tiene las acciones diarias, cada una de las entidades distritales como Secretaría Distrital de Ambiente y UAESP deben, sumado a estos esfuerzos, fortalecer estrategias de cultura ciudadana con mobiliario público y campañas permanentes.
Concejal de Bogotá
