Pereza fiscal

Además de la movilidad, es esencial la provisión de servicios de salud y educación públicos con mejor calidad, destinados principalmente a poblaciones pobres. El Distrito debe comprometerse con programas de seguridad y convivencia para sus ciudadanos. Y un aspecto básico, se debe recuperar el sentimiento de pertenencia hacia la ciudad y prepararnos para el postconflicto.

Son muchas las necesidades que se pueden enfrentar exitosamente en la medida en que se cuente con los recursos necesarios.

El alcalde Peñalosa ha solicitado al Concejo Distrital un cupo de endeudamiento por $5 billones. Un poco más $3 billones se destinarían para construir y mejorar la estructura de Transmilenio entre las cuales está la nueva troncal de la carrera Séptima. $0.8 billones serán destinados para la financiación de la primera línea del metro. Un poco más de $ 1 billón se irá para la construcción y adecuación de colegios, la adquisición de cámaras de vigilancia y construcción de algunas estaciones de Policía, y la construcción de parques y alumbrados en los barrios más populares de Bogotá.

La aprobación del endeudamiento, tal y como están las cosas, no es una alternativa, sino una obligación. Se necesitan estos dineros para inversión.

Sin embargo, el Distrito debe avanzar hacia una mayor eficiencia fiscal en el recaudo tributario para garantizar la sostenibilidad de las finanzas públicas, la continuidad de los programas sociales y la inversión en infraestructura, y no tener que seguir apelando a estos niveles de endeudamiento tan altos. Una de las tareas prioritarias que debe emprender la Secretaría de Hacienda del Distrito es combatir la evasión de impuestos, acudiendo a los instrumentos que le brinda el Estatuto Tributario de Bogotá.

Hoy en promedio, los índices de evasión de los impuestos de Industria y Comercio, Predial y Vehículos en Bogotá se acercan al 18%. Las mayores tasas de evasión de ICA, por ejemplo, se evidencian en los sectores de construcción, comercio, hotelería, servicios financieros, inmobiliarios y empresariales. La evasión para el Gobierno Distrital se acerca a los $2 billones. Esta es una situación insostenible.

Frente a una situación parecida, la Alcaldía de Barranquilla informó que abrirá procesos de cobros coactivos y anunció el embargo financiero y de bienes a 14.336 contribuyentes morosos del predial de la vigencia del 2016. La alcaldía de Santa Marta liderará varios operativos para congelar los predios que están en manos de los mayores deudores de la ciudad. ¿Qué acciones va a adoptar Bogotá?

La Secretaría Distrital de Hacienda de Bogotá debe demostrar que no se ha dejado atrapar por la "pereza fiscal" para cobrar sus impuestos.