Son muchos los interrogantes que surgen frente a lo que será el Plan de Ordenamiento Territorial que la administración distrital asegura va a presentar al Concejo en el mes de agosto, con el fin de dar un cumplimiento a una de las promesas de campaña. No es claro que contendrá dicho documento, que formulará el Plan de los próximos 12 años. Preguntas, a las que considero se debe responder, teniendo en cuenta lo que se conoce en la comisión de POT del Cabildo, así como los documentos de diagnóstico publicados por la ex Secretaría Adriana Córdoba y lo dicho en medios por la actual Secretaría Jaramillo que no muestra un sendero claro.
Modelo de ciudad
Sigue sin vislumbrarse el modelo de ciudad que se plantea para este POT. Se habla de diversas escalas como: la regional, la metropolitana, la zonal (ahora conocida como distritos verdes) y la barrial, sin embargo, más allá de extensos escritos, no se da a entender de qué manera se dará lineamientos puntuales y viables para abordar cada una de estas escalas. Por eso pregunto: ¿Cómo se van a viabilizar, por ejemplo, las escalas regional y metropolitana? ¿Cómo se van a viabilizar teniendo en cuenta la conurbación y la amplia ocupación de los suelos de la sabana, ante el estancamiento de la norma urbana de Bogotá y la falta de nuevo suelo habilitado? ¿Qué va a pasar con las dinámicas barriales existentes teniendo en cuenta el tejido social que existe, mientras se debe habilitar suelo para controlar la expansión desordenada?
El rol de la renovación urbana
Hay que recordar que la renovación urbana planteada en el POT de 2019 se basó en diversos criterios técnicos con el fin de dar un mejor aprovechamiento del suelo de la ciudad como la renovación en corredores de transporte masivo existente y proyectado, renovación en sectores como el 7 de Agosto por su ubicación estratégica y también dar la posibilidad a urbanizaciones con más de 30 años de construidas que presentaran fallas o por voluntad de los propietarios asociarse con constructores para aprovechar ese suelo.
Ese tratamiento muy polémico para la ciudad y usado como caballito de batalla por quienes hoy son gobierno para destruir un POT técnico y acorde a las necesidades de la ciudad, nos lleva a preguntar, cuál es el rol de la renovación si no se especifica qué va a pasar con los corredores de transporte masivo o si están dispuestos a asumir costos políticos para determinar zonas de renovación urbana que permitan habilitar suelo en sectores existentes pero necesarios para no seguir expulsando a bogotanos a la sabana.
Norma urbana
Muy de la mano con el punto anterior una de las más grandes preocupaciones que me surgen es qué nos van a presentar exactamente. Y es que uno de los puntos importantes es la norma urbana, fundamental para la reactivación económica que el POT puede ofrecer a la ciudad teniendo en cuenta lo dicho en medios por la Secretaría Jaramillo, porquea que es acá en donde realmente se materializa la visión de ciudad que quieren construir y la que brinda la línea de las reglas que deben seguirse por los diversos actores, qué se puede o no hacer, de cuánto se puede crecer en altura y dónde; las mejoras de espacio público, plusvalías por citar unos ejemplos.
El POT 2019 planteaba a detalle la norma en cada uno de sus tratamientos, ahora, con el cambio de secretaria y su equipo, así como con las demoras en contratación de técnicos para el Plan, veo poco viable que nos presenten una norma igual de detallada como la que llego al Concejo a finales de la administración anterior, preocupa porque la ex Secretaría Córdoba anunció el año pasado que posiblemente esto se iría mediante decretos reglamentarios que por ley podían elaborar hasta en 8 años una vez el Concejo aprobara el nuevo POT. Entonces, ¿la ciudad va a tener una nueva norma funcional hasta dentro de 8 años, así como la de UPZ (Unidad de Planeamiento Zonal) que en 17 años de vigencia se sigue actualizando? evidenciando la insuficiencia de esta para materializar la visión de ciudad.
Proyectos estratégicos
Teniendo en cuenta que quienes hoy son gobierno cuestionaron y buscaron acabar proyectos de expansión como Lagos de Torca, Ciudad Río y Lagos de Tunjuelo establecen como determinantes estos mismos, pues los dos últimos, solo cambiaron el nombre teniendo en cuenta la respuesta de Planeación y Hábitat donde esa parece ser el único gran cambio para hacerlos pasar como propios.
En realidad son más las preguntas sin respuesta en esta discusión; por cosas como las ya mencionadas es muy pertinente tener en cuenta si este POT será como el flamante ‘Corredor verde de la Séptima’, donde recogen toda las idea de la administración anterior, le cambian el nombre y le ponen su sello para intentar hacerlo pasar como propio e innovador, cuando en plena campaña atacaron sin argumentos de fondo cada propuesta de ciudad que ofrecía solución a todos los ciudadanos.
Concejal de Bogotá