La excelente noticia que recibieron el día de ayer los bogotanos sobre la decisión de la alcaldesa Claudia López de construir la Troncal de TransMilenio por la calle 13 se vio empañada por los anuncios realizados horas más tarde donde señaló: “El TM que haremos en calle 13, no el mismo que dejó diseñado la administración anterior. Será de la mitad del tamaño propuesto dado que la demanda de pasajeros se distribuirá con el Regiotram Occidente para que se complementen y se deje otro carril a carga y otro al bicicarril”.
No es de extrañar que la alcaldesa cambie de parecer con los proyectos de infraestructura de la ciudad, que proponga ideas y luego la evidencia técnica demuestre lo contrario y la sensatez gane al final. Esperamos que la reingeniería de valor que desde el IDU desarrollaran para disminuir los costos no vaya en detrimento del proyecto y mejore parcialmente la calidad de vida de los habitantes del occidente de la ciudad que necesitan soluciones de movilidad como las propuestas por la administración del exalcalde Enrique Peñalosa. Queda en el tintero y como experiencia el hecho que la alcaldesa no se haya decidido desde un inicio por continuar con esta troncal para la cual pudo solicitar hace unas semanas parte del cupo de endeudamiento tan grande que paso al Concejo de Bogotá para su aprobación y que valiera la pena el techo de 10,7 billones solicitados.
Vale resaltar que los estudios y diseños que ya fueron entregados a la Administración Distrital contemplan una autopista urbana con dos (2) calzadas, en las cuales estarán: dos (2) carriles para sistema BRT de Transmilenio y cuatro (4) carriles de tráfico mixto, con espacio público de 11 metros, zonas verdes y 60,2 km de ciclorrutas, que permiten que esta vía sea la joya de la corona como lo ha señalado Nicolas Estupiñán, Secretario de Movilidad, con más de 1.112.860 m2 de espacio público.
Un recorrido de 11,4 kilómetros que inicia desde el borde de la ciudad y llega hasta la carrera 50 para integrarse operacionalmente con la troncal ya existente de las Américas y beneficia a más de 1 millón de habitantes del occidente de la ciudad, tendrá 13 estaciones con 114 buses biarticulados última tecnología, 1 estación de cabecera, 1 patio taller, 5 intersecciones a desnivel y 2 pasos a nivel para complementar el Regiotram de Occidente como lo ha señalado el Gobernador de Cundinamarca Nicolas García.
Tanto el Regiotram como la Troncal son de gran importancia para la movilidad de Bogotá y la región, no deben concebirse como proyectos rivales sino complementarios pues cada uno atenderá poblaciones específicas y brinda beneficios a toda la ciudadanía, permitiendo consolidar la multimodalidad a la cual se le apuesta para garantizar diversidad de opciones a los bogotanos en materia de transporte público y beneficios adicionales como el espacio público y las zonas verdes.
Ahora bien, si se revisa el trazado de cada proyecto se evidencia que la troncal va por toda la calle 13 o Avenida Centenario, mientras que el Regiotram utilizará la vía férrea existente la cual se encuentra en casi todo su recorrido en la calle 22 que se encuentra con distancias entre 1 km y 1,5 km de la calle13 a lo largo del recorrido, por lo cual no competirán sino que se complementaran para mejorar la movilidad.
Como en muchas oportunidades ojalá gane la sensatez por el bienestar integral de las comunidades en Bogotá, y el proyecto sea construido de manera completa y no a medias, que el beneficio para la ciudadanía llegue en todos los aspectos y en especial en materia de movilidad masiva, multimodal y amigable con el ambiente.
Concejal de Bogotá