El concejal aseguró que Rodríguez dejó asignado un contrato a la asociación Arkambiental, con quien la funcionaria había laborado ocho años atrás, desde el 2006 hasta el 2014.
“La señora Claudia Liliana Rodríguez laboró durante ocho años en la asociación Arkambiental, según la experiencia reportada en el Sistema de Información Distrital de Empleo y Administración Pública – SIDEAP”, manifestó.
Asimismo, afirmó que la estrecha relación de la saliente directora se evidencia “cuando el 28 de noviembre de 2017, firmó el contrato 171 de 2017” con la mencionada asociación, “para la custodia y manutención de los animales remitidos por el Instituto Distrital de Protección y Bienestar Animal”.
Según Torrado, lo sospechoso de ese contrato es que “desde que se publicaron los pliegos, hasta que se adjudicó, pasaron tan solo 10 días y que únicamente se presentó esa asociación por lo que terminó ganándose el proceso”.
De igual forma, rechazó la adjudicación de ese contrato, porque “en tiempo record”, se le dio precisamente a esa fundación con la excusa de que “solo ellos presentaron propuesta”.
Finalmente, mediante una comparación, explicó que la planta de personal del Instituto de Protección Animal asciende a 36 cargos y que estos servicios personales valen 4.110 millones de pesos para el 2018, mientras que desde el pasado primero de enero en la misma entidad se han suscrito aproximadamente 267 contratos de prestación de servicios, que valen más de 7.300 millones de pesos.
“La señora Claudia constituyó una planta paralela de contratistas que supera 7 veces la planta de personal oficial y que vale 3000 millones de pesos adicionales”, concluyó.