Al respecto, el cabildante resaltó que no se debe perder de vista en este debate que Colombia en la Constitución Nacional consagró como principios fundamentales el libre desarrollo de la personalidad y la no discriminación por razones de raza, sexo, origen nacional o familiar, lengua, religión, opinión política o filosófica, igualmente estableció que la educación formara a los colombianos en el respeto a los derechos humanos, a la paz y la democracia.
En este sentido la Ley 115 de 1994, “Ley General de Educación”, desarrolló como fin esencial de la educación, el pleno desarrollo de la personalidad de los y las estudiantes igualmente; definió los mecanismos de participación de la comunidad educativa a través de la organización del gobierno escolar, sus responsabilidades en el diseño y aprobación de los manuales de convivencia y el Proyecto Educativo Institucional, como cartas de navegación para el buen funcionamiento y autonomía de los colegios.
Nieves Herrera, expresa su preocupación, por cuanto a pesar de que el alto tribunal, exhorta a las autoridades y a la sociedad en general a predicar la tolerancia y mantengan un profundo sentido de respeto por la diversidad, como bases fundamentales para la construcción de una sociedad éticamente justa, se presenten manifestaciones en contra de este propósito, como las que se han suscitado en los últimos días y que no se compadecen con una sociedad democrática y un Estado social de derecho como el Colombiano.
Por el contrario, los retos hoy de la Educación en Colombia son los de diseñar políticas que permitan prevenir la violencia y mejorar la convivencia en los entornos escolares, “la reiteración de eventos violentos en la escuela pueden contribuir a que los jóvenes interioricen y reproduzcan comportamientos agresivos, ser víctima de algún tipo de violencia se constituye en uno de los principales factores de riesgo para su reproducción, pues los adolescentes que la observan o son tratados de manera violenta, son más proclives a imitarla o pensar que es una solución viable para sus problema”[1] refirió el concejal al citar el estudio clima escolar y victimización en Bogotá, que evidencia como los componentes de agresión y acoso repetidos en la escuela se asocian con la prevalencia de modelos de masculinidad hegemónica, soportados en la misoginia y la supresión de todo aquello que no obedezca a la heterosexualidad normativa, situación que requiere de la más amplia reflexión y toma de decisiones para transformar estas realidades en la escuela.
Razones por las cuales, la escuela es el escenario natural para la construcción de una pedagogía para la paz, en donde primen los principios del respeto, la inclusión y la igualdad, enfatizó el cabildante.
Celio Nieves Herrera
Concejal de Bogotá
