El trabajo infantil pasó de 11 por ciento en el 2014 a 4,9 por ciento en el 2018, según las cifras del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) y eso es una buena noticia porque significa que la ciudad logró reducir el porcentaje en 6,1, todo gracias a una inversión de 29 mil millones de pesos en este gobierno.
Es importante señalar que para que este logro fuera posible se ha hecho un trabajo intenso para identificar a niños, niñas y adolescentes que están en riesgo de trabajo infantil, se han facilitado los canales de denuncia para que las personas informen de los casos que conozcan y se ha generado una sensibilización permanente de las entidades.
Hoy se cuenta con la ‘Ruta para la prevención y erradicación del trabajo infantil ampliado’, para vincularlos al sistema de educación, salud, cultura, recreación y deporte.
Hay que resaltar el trabajo articulado de las secretarías distritales de Educación, Integración Social, Salud, Seguridad, Convivencia y Justicia, Gobierno, Hábitat e Integración Social, los institutos para la Economía Social (IPES), el Instituto Distrital para la Protección de la Niñez y la Juventud (Idiprón), el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) y la Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos (UAESP).
Una evidencia de acciones concretas es que la secretaría de Educación, por ejemplo, logró mantener en el sistema entre el 2016 y el 2018 a 7.782 niños, niñas y adolescentes que estaban trabajando. Ahora están en los colegios públicos.
La Secretaría de Integración Social adelanta la ‘Estrategia Móvil de Prevención y Erradicación del Trabajo Infantil’, mediante al cual se busca a niñas, niños y adolescentes en las calles.
Esto demuestra que la acción integrada de las entidades da resultados. Son políticas públicas con resultados, en bien de nuestros niños.
Concejal