La concejal Mafe Rojas reveló que, según respuestas a derechos de petición solicitados, incluso los mismos publirreportajes pagados por la Alcaldía, se evidencia que el Distrito piensa dejar contratadas varias obras para la construcción de nuevas troncales de Transmilenio y las extensiones de algunas que costarían alrededor de $7.4 billones.
La concejal del Partido Alianza Verde aseguró que la troncal de la carrera 68 será la más costosa con un presupuesto de $2.6 billones, lo que a su vez genera un costo de $153 mil millones por kilómetro, cerca de 49 millones de dólares.
Las obras que se desean dejar contratar Peñalosa son: Av. Cali entre la Av. las Américas y el límite sur del distrito, Troncal Carrera Séptima, Troncal Carrera 68, Troncal calle 13 entre la carrera 50 y el límite occidental del distrito, y la extensión de la Troncal Caracas entre Molinos y Yomasa. Cinco obras que esperan sumar 60 kilómetros adicionales a la red existente de Transmilenio que hoy es de 113 kilómetros.
Por otro lado, el tramo a contratar de la Av. Cali costaría $1 billón de pesos, la carrera Séptima $2.4 billones, la extensión de la Caracas aproximadamente $400 mil millones y la troncal en la calle 13 aproximadamente otro billón. Todo suma en total $7.4 billones, para tener una idea de la magnitud de esta cifra, es más de lo que Sudáfrica gastó en la construcción de los estadios para realizar su Mundial de Futbol en el año 2010.
“Pero no solo hay un problema con la cantidad de dinero que se piensa dejar contratado, sino con la conveniencia de las obras proyectadas, si bien la extensión de la troncal Av. Cali y la Caracas parecen tener un consenso amplio para su ejecución, los demás proyectos son tildados de inconvenientes e impopulares” anotó Rojas.
La cabildante explicó que por ejemplo la troncal de la Calle 13 es duramente criticada ya que el Regiotram de Occidente pasará en gran parte de su recorrido a menos de 1 kilómetro de la Troncal proyectada, generando una competencia indeseable.
Entretanto la Av. 68 es cuestionada por su alto costo, dado que no hay referencia de otra troncal a nivel mundial con mayores costos por kilómetro que esta. Para dar un ejemplo el recién inaugurado Tranvía de Cuenca en Ecuador, tuvo un costo aproximado de 14 millones de dólares por kilómetro en comparación con los casi 49 millones de esta. Por último, la Troncal carrera Séptima cuya contratación sigue actualmente detenida por fallos judiciales y que tiene una inmensa oposición ciudadana.
Para la cabildante Rojas las nuevas troncales a diferencia de las extensiones también generan un riesgo y es el de aumentar fuertemente la demanda en las estaciones más colapsadas del sistema, ya que aumentarían en una gran cantidad de usuarios nuevos al sistema, usuarios que se dirigen hacia las mismas zonas que los actuales. Por el contrario, las extensiones están pensadas para mejorar el servicio a los ciudadanos que ya hoy usan el servicio, reduciendo tiempos de viajes y saturación en los portales respectivos. Sorprende entonces que un proyecto como la extensión de la troncal de la Calle 80 hasta Puente Guaduas, que tiene consenso no tenga recursos.
Lla concejal advirtió que la Alcaldía sigue empeñada en poner todos “los huevos de la movilidad en una sola canasta, la de Transmilenio. No se avanzó en la contratación del reclamado cable de San Cristóbal, ni en trenes ligeros que sin mayores razones fueron descartados”.
Finalmente, la cabildante Rojas dijo que Bogotá debe tener margen para financiar la red de metros, introducir trenes ligeros y los cables aéreos pendientes. “El énfasis en Transmilenio debería estar en el mejoramiento de la red actual y del servicio, y no en obsesionarse por convertirlo en la única alternativa para los usuarios”.
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