La iniciativa fue producto de una profunda investigación adelantada por el equipo de trabajo del Concejal Gutiérrez, en cabeza del asesor Santiago Balcázar Forero, en la cual se pudo determinar que, a pesar de los avances alcanzados en materia de atención a la primera infancia durante los últimos años en el Distrito capital, aún persisten algunos aspectos críticos que afectan, tanto de manera directa como indirecta, el desarrollo integral de los menores de seis años en la Ciudad Capital. Así mismo, se estableció que la política pública vigente de atención de los menores, está desactualizada en materia normativa.
Vale señalar que el desarrollo integral, en cuanto derecho de los niños y niñas, se percibe como el proceso singular de transformaciones y cambios de tipo cualitativo y cuantitativo mediante el cual el sujeto dispone de sus características, capacidades, cualidades y potencialidades para estructurar progresivamente su identidad y su autonomía. El desarrollo integral se expresa de manera particular en cada uno de los niños y las niñas. La interacción con una amplia variedad de: actores, contextos y condiciones es significativa para el potenciamiento de las capacidades y de la autonomía progresiva. Adicionalmente, se establece que, en el marco del derecho al desarrollo integral, son derechos impostergables la atención en salud y nutrición, el esquema completo de vacunación, la protección contra los peligros físicos y la educación inicial. Así mismo, en el primer mes de vida deberá garantizarse el registro civil de todos los niños y las niñas.[1]
En este orden de ideas, es imprescindible e improrrogable establecer y fortalecer los fundamentos legales, políticos, conceptuales, técnicos, administrativos, operativos y de gestión dirigidos a la atención para el desarrollo integral de la primera infancia, ya que los datos arrojados por distintas fuentes, dan cuenta de que los menores aún padecen situaciones que ponen en riesgo su bienestar, como: desnutrición crónica, enfermedades cardiorrespiratorias, trabajo infantil, violencia sexual y física, abandono, entre otros.
Este Acuerdo es muestra de nuestro compromiso con la Bogotá Social por la que abogamos. Seguiremos trabajando para que Bogotá siga siendo pionera en la defensa y protección de la primera infancia, un espacio de inclusión y de defensa de los derechos de la ciudadanía.
[1] Ley 1098 de 2006, “Por la cual se expide el Código de la Infancia y la Adolescencia”. Artículo 29