En la sesión de la Comisión Primera del Concejo del pasado primero de septiembre, elevé una solicitud para que se diera prelación al necesario debate de control político al Jardín Botánico de Bogotá y a la Secretaría de Ambiente en relación con las talas de árboles que se vienen presentando en la ciudad.
Este es un tema al que vengo haciendo seguimiento desde hace varios meses, recopilando información, registrando los eventos, recogiendo testimonios e interrogando a distintas entidades relacionadas con el tema: IDRD, Jardín Botánico, Secretaría de Ambiente, IDU, entre otras. Pero, sobre todo, reuniéndome con distintas comunidades afectadas para escuchar sus reparos, dudas y razones.
Así es como, con mi equipo, hemos visitado y charlado con el grupo Ecomunitario del Parque El Virrey y los vecinos del parque Ciudad Montes, de la Soledad y barrios aledaños; hemos hecho seguimiento al proceso de Bosque Bavaria y Parque Techo; y presenciamos una reunión de socialización de la administración con el vecindario del Parque Japón. De todo este proceso tenemos un panorama general que nos arroja una visión de la cadena de vacíos e inconsistencias que han llevado a la situación actual de alarma y descontento de los ciudadanos.
Hemos encontrado problemas desde la misma normativa que sustenta las talas, la interpretación que hace de ella la Administración, los contratos de silvicultura y mantenimiento de arbolado, la ejecución de estos contratos y, finalmente, los procesos posteriores a las talas. Pero, sobre todo, hemos encontrado enormes problemas en la forma atropellada como la administración se relaciona con la comunidad. Algo que se ha vuelto una constante en esta alcaldía.
Sin embargo, nada de eso nos sorprende porque estamos repitiendo una historia que la ciudad ya experimentó en la primera administración Peñalosa. Esto sólo es la continuación de una visión de ciudad congelada en el tiempo durante veinte años.
La administración debe darle respuesta a los reparos e inquietudes que, con justa razón y motivaciones, la ciudadanía ha hecho a las talas de árboles. Un procedimiento que parece responder, únicamente, a un criterio paisajístico completamente desconectado del manejo integral del ecosistema urbano.
En vista de que varios concejales tenemos la misma preocupación, el Presidente de la Comisión Primera, el HC Germán García, recibió de buen grado la solicitud y fijó fecha para el debate el próximo 21 de septiembre. La urgencia del tema no da espera y confiamos en que se cumpla la cita fijada por el Presidente de la Comisión para que las entidades encargadas respondan por sus acciones.