Este viernes, la Comisión de Hacienda dio continuidad al debate de control político sobre la calidad en la entrega de paquetes alimentarios y los nuevos parámetros de atención en comedores comunitarios, citado por el concejal Juan Baena y la bancada de Bogotá Para La Gente.
En esta ocasión, los concejales voceros y no voceros dieron a conocer sus impresiones sobre el tema en cuestión.
En el caso del concejal Manuel Sarmiento, vocero del Partido Dignidad, hubo argumentos en defensa del trabajo que ha realizado la secretaria de Integración Social, Xinia Navarro. "Esta Administración cambió el modelo de contratación de los programas de alimentación. También se revisaron las remuneraciones que se pagaban por desgaste de elementos en los comedores comunitarios", dijo.
En nombre de la Alianza Verde habló la concejal Lucía Bastidas, quien comparó las medidas de la alcaldía de Claudia López con las de el exalcalde Enrique Peñalosa. "En el 2020, había 134 comedores y 34.174 cupos día; mientras que, en el 2021, 96 comedores y 32.720 cupos contratados", advirtió.
A pesar de declararse abiertamente en oposición a la alcaldía actual, el concejal Carlos Carrillo reconoció el trabajo liderado por Navarro. "Esta Administración ha hecho un intento por ampliar el acceso a la alimentación de los más vulnerables, pero hay que invertir en infraestructura y de eso no hay mucho", señaló.
A su turno, el concejal Marco Acosta se refirió a las propuestas que podría incluir el Distrito para reducir los problemas en entregas de paquetes alimentarios, como la calidad de los productos. “Deben hacer control de los cambios de alimentos en mal estado antes de ser entregados a los beneficiarios, así se podrá conocer los procesos del operador contratado para tal fin”, afirmó.
Por otro lado, la concejal Ana Teresa Bernal criticó las medidas que, para ella, no resuelven de fondo el hambre ni la pobreza extrema que se viven en Bogotá. "El debate, más allá de cómo entregamos la comida, lo cual es importante, debe ser sobre la política social de esta Administración, que no está comprometida con la superación de la pobreza", aseguró.
Finalmente, el concejal Álvaro Argote se refirió sobre las medidas adoptadas por esta Administración y reconoció la labor de alcaldes de izquierda por mejorar la salud de los bogotanos. “Este debate sobre la política social en Bogotá es un debate que debe permanecer abierto si no cambiamos el sistema productivo", agregó.
Al terminar las intervenciones de los concejales, se refirió la Administración, en cabeza de la secretaria de Integración Social, Xinia Navarro, y el secretario de Hacienda, Juan Mauricio Ramírez. “Nosotros creamos la canasta más económica del país. La atención de los trapos rojos no la hizo Integración Social", dijo Navarro, a lo que añadió Ramírez que "el programa de Ingreso Mínimo Garantizado atenderá directamente la pobreza extrema".
“Estas no fueron acusaciones ligeras. Yo hago debates para mejorar”, aseguró el concejal Juan Baena, como conclusión del debate. Al final de su intervención también reveló dos presuntas irregularidades en la adjudicación de contratos de la Secretaría de Integración Social. La Administración se comprometió a aclarar las dudas que quedaron de manera escrita.
Concejo de Bogotá