En el marco del quinto debate a la citación de la nueva flota de Transmilenio, la Concejal María Fernanda Rojas, insistió en la necesidad de que la Administración incluya en este proceso de adjudicación aspectos fundamentales que permitan un mejor sistema de transporte en Bogotá.
Según lo explicado por la Concejal durante su intervención en la plenaria, en la nueva licitación de Transmilenio hay muchos puntos que causan preocupación, desde la negativa de la administración a incluir un porcentaje mínimo de buses de tecnologías menos contaminantes, las posibles colusiones para ofertar únicamente diésel, la densidad de pasajeros en los buses, hasta las adecuaciones de las estaciones de Transmilenio para poder operar con más buses biarticulados, entre otros aspectos.
De igual manera Rojas explicó que la administración distrital ha dicho que no puede dar porcentajes mínimos de tecnologías menos contaminantes (Híbridos Euro VI, eléctricos y a gas) aduciendo que eso podría direccionar la licitación. Pero la realidad es que al menos tres empresas están en la capacidad de ofertar buses con las tecnologías que se consideran menos contaminantes a las Euro VI, por lo tanto las excusas de Transmilenio no van a lugar.
“Si los argumentos de la gerente de Transmilenio María Consuelo Araujo, fueran válidos, no podría exigirse que casi el 70% de la flota sea de biarticulados, ya que solo dos empresas ofrecen este tipo de vehículo de piso alto” afirmó la Concejal del Partido Alianza Verde.
Respecto a las adecuaciones en las estaciones de Transmilenio que deben hacerse para que los casi 1000 buses biarticulados que van a llegar operen de forma adecuada, la Cabildante dijo que la situación es más que preocupante. Según Transmilenio se requiere adecuar 47 estaciones, para lo cual la entidad asegura que ya existe un proceso para la contratación de las obras requeridas. Pero al indagar en el sistema de información de contrataciones públicas (SECOP), al 23 de mayo, el único proceso publicado hace referencia a la contratación de los diseños de 22 estaciones, cuya fecha de terminación está proyectada para el mes de septiembre.
Por tanto, las 47 obras que requieren cambios no han iniciado el proceso de licitación. “Esto quiere decir que lo más probable es que un alto porcentaje de esas 47 obras anunciadas para el buen funcionamiento del sistema con un alto número de buses biarticulados no estén listas al momento de entrar a operar la nueva flota” anotó Rojas.
Así mismo la Concejal aseguró que la Administración se ha mostrado renuente a bajar el porcentaje de buses biarticulados exigidos en la licitación, a pesar de ser claro que las adecuaciones requeridas en las estaciones no van a estar listas para cuando los buses entren en funcionamiento, con lo cual el aumento en capacidad que se obtiene con el mayor tamaño de los buses, se puede perder por el aumento en tiempos de espera al no tener las estaciones adecuadas. Además, la oferta de biarticulados de tecnologías distintas al diésel es muy limitada; solo una empresa los produce a gas y no existen hasta el momento biarticulados eléctricos.
Finalmente Mafe Rojas, dijo que en esta licitación se vive un pulso entre los valores ambientales que debería tener y un intento desesperado por aumentar la capacidad del sistema. Aunque Transmilenio no es el mayor responsable de la contaminación de la ciudad, sí es una de las fuentes móviles que propicia la mayor exposición al material particulado.
@MafeRojas
Prensa
Angela María Pinzón
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