Durante el debate sobre la situación de la Universidad Distrital Francisco José de Caldas, la concejal Clara Lucía Sandoval destacó graves problemas de infraestructura y gestión que afectan la capacidad de la Universidad para proporcionar una educación de calidad.
La cabildante inició su intervención señalando que “es esencial que los jóvenes tengan la libertad de elegir la universidad en la que desean estudiar, sin imposiciones del Estado o del Distrito. Por ello, celebro iniciativas como ‘Jóvenes a la E’, que facilitan esta elección,”. Destacó que la educación, tanto pública como privada, debe ser eficiente y centrada en las necesidades de los estudiantes.
La concejal Sandoval, tras dialogar con estudiantes, resaltó graves problemas que persisten a pesar de las ampliaciones y mantenimientos recientes. La Facultad de Matemáticas y Ciencias Exactas, por ejemplo, no cuenta con edificios propios y debe compartir instalaciones con la Facultad de Ciencias y Educación. En la sede La Macarena, las goteras son comunes durante la temporada de lluvias, y en la Facultad Tecnológica, tanto los baños como los ascensores están en condiciones deplorables.
“Según sus testimonios, los baños del bloque 1-4 están en un estado deplorable, con malos olores persistentes, falta de agua y techos en deterioro. Además, la iluminación es escasa o inexistente. De los tres ascensores disponibles, solo uno está en funcionamiento. Además, las denuncias indican una distribución desproporcionada de los recursos en los laboratorios, lo que agrava la situación" resaltó la concejal.
También se refirió al escándalo de corrupción de 2020, donde el ex rector desvió al menos 12 mil millones de pesos, Sandoval criticó la falta de control y auditoría que permitió este fraude y exigió la implementación de medidas estrictas para evitar que tales actos se repitan. “Es preocupante que algunas personas involucradas en esa gestión aún ocupen cargos directivos” manifestó.
La cabildante hizo un llamado urgente a que la Universidad revise minuciosamente sus procesos de gestión financiera, infraestructura y distribución de recursos. “Los estudiantes y el personal merecen una universidad que funcione eficientemente, sin las sombras de corrupción e incompetencia que han afectado su reputación” recalcó.
“Hacemos un llamado urgente a las autoridades competentes y a la administración universitaria para que se aborden estas diversas situaciones con firmeza. La Universidad Distrital Francisco José de Caldas es una institución vital para Bogotá y debe reflejar su compromiso con la educación de calidad, transparencia y responsabilidad” concluyó.
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