El concejal Humberto ‘Papo’ Amín, reconocido por su compromiso con la seguridad y la movilidad de la capital, es contundente al hablar sobre la inseguridad en el Sistema de Transporte Masivo, en el que se encuentra el componente troncal, zonal cable, y los alimentadores.
Amín resalta que, aunque Bogotá inició el 2024 con preocupantes niveles de inseguridad, bajo la administración del alcalde Carlos Fernando Galán se han implementado importantes medidas que han comenzado a revertir esta tendencia.
En Bogotá el hurto a personas entre enero y julio de 2023 registró 92.678 casos, mientras que para el mismo periodo de 2024 se presentaron 76.685 casos, disminuyendo un 17.3%. Del total de hurtos en Bogotá, el 6% ocurren en el Sistema de Transporte Masivo.
En su análisis, Amín presenta datos esenciales sobre la situación de inseguridad en Transmilenio y da a conocer los diez puntos entre estaciones y portales, con las cifras más altas de hurtos a personas entre enero de 2023 y julio de 2024, a saber:
- Avenida Jiménez (402 hurtos)
- Ricaurte (225 hurtos)
- Portal del Norte (143 hurtos)
- Calle 100 (142 hurtos)
- Calle 76 (124 hurtos)
- Portal del Tunal (122 hurtos)
- Banderas (104 hurtos)
- Portal de las Américas (94 hurtos)
- Portal de Usme (90 hurtos)
- Marly (89 hurtos)
Ahora bien, entre el 1 de enero y el 31 de julio de 2024, los hurtos en el Sistema Integrado de Transporte Público se presentaron así: 2.313 en buses articulados, 1.241 en estaciones y portales de Transmilenio, 664 en buses zonales y 542 en buses alimentadores.
En promedio, durante enero y julio de 2023 hurtaban alrededor de 35 personas diarias en el Sistema Integrado de Transporte Público y durante este mismo periodo de 2024 esta cifra bajó a 23 personas diarias.
Y es que, luego de evidenciar tales problemáticas en el sistema de transporte masivo, el concejal Amín propone entre otras acciones, la instalación de tótems de seguridad en estos puntos críticos, tal cual lo dejó plasmado a través de un Proyecto de Acuerdo de su autoría, en el que busca fortalecer la seguridad en la capital del país, sin olvidar la necesidad de equipar mejor al personal de seguridad en TransMilenio y brindarle mayor apoyo para reducir las cifras de uniformados lesionados, que en los últimos cuatro años se acerca a 200.
Además de la inseguridad, el cabildante también hizo énfasis en la evasión en el componente troncal, que para el primer semestre de 2024 tuvo un costo estimado de $119.135 millones de pesos, por lo que solicita a la administración replicar e intensificar aquellas medidas que han funcionado para reducir los colados.
Por otro lado, el concejal Amín se refirió a los siniestros viales donde se vio involucrado un bus del Sistema Integrado de Transporte Público, indicando que los lesionados han venido en aumento al comparar los años 2022 y 2023, incrementando un 5% para el componente troncal, 10% en el componente zonal y el 1% en el componente alimentador. Y para el primer semestre de 2024 se habían presentado ya 958 siniestros, su mayoría en el componente zonal y con un saldo de 34 víctimas fatales.
Indicó el concejal que la Secretaría de Movilidad no puede echarle entonces la culpa a la velocidad, y manifiesta que no está en desacuerdo con que los buses articulados tengan un límite máximo de 60 km/h. Con lo que fue enfático en decir es que tratar de forma diferente a los particulares que tienen que ir a 50 km/h es injusto, sobre todo porque mientras unos pueden ir a 60 km/h llevando gente de pie en el SITP, los otros que van sentados en sus carros con su cinturón de seguridad sí les toca a 50 km/h.
Por último, para el cabildante, es importante que el Sistema de Transporte Masivo TransMilenio sea un espacio seguro para los bogotanos y que se trabaje de manera conjunta con las diferentes entidades con el fin de mejorar los índices de seguridad en la capital del país.