Por ejemplo, solo en una noche entre la carrera 30 y 50 en la Avenida Primero de Mayo fueron robados alrededor de 500 conos que demarcaban el bici carril temporal, sin que nadie, aparentemente, se diera cuenta.
Bogotá fue ejemplo para otras ciudades de Colombia y el mundo en los meses de marzo y abril por la rápida implementación de bici carriles temporales, (alrededor de 80 km nuevos), en muchas de sus principales vías para facilitar una movilidad más sostenible durante la pandemia, compensando así la decisión de manejar el transporte público, generalmente abarrotado, con solo el 35% de su ocupación habitual.
Sin embargo, en las últimas semanas las quejas por la desaparición de muchas de estas ciclorrutas ha sido una constante, de acuerdo con indagaciones preliminares y aunque parezca un típico caso de realismo mágico, lo que está llevando a que estas desaparezcan son los robos masivos de conos y maletines que se están en diferentes zonas de Bogotá.
Los robos los realizan en horas de la madrugada, usando camiones y vehículos, se trata de estructuras organizadas que nos llevan a preguntar si existe un “cartel de los conos”.
Tanto la Policía Metropolitana como la Fiscalía aducen no dar abasto para responder a esta situación y a la respectiva investigación, dado que en tiempos de Covid-19 han surgido tareas adicionales para los funcionarios de dichas entidades.
No es posible realizar una inversión en logística para recoger e instalar diariamente estos equipamientos. Por eso hacemos un llamado a denunciar cuando sean vistos conos con los logotipos del IDRD, usados con fines distintos a la demarcación de ciclo carriles; las denuncias se pueden realizar a través de su página de Facebook o su cuenta de twitter @IDRD. Del mismo modo pedimos que cuando se vean vehículos recogiendo conos dar pronto aviso a las autoridades.
“Cada cono robado le cuesta a la ciudad entre 60 y 80 mil pesos, la ciudad no puede darse el lujo de estar comprando todos los meses este tipo de material. En estos momentos donde todas las capacidades institucionales están al límite debido a la pandemia, se requiere más que nunca el apoyo de la comunidad para atenuar este tipo de situaciones. Los ciclistas deben tener menos riesgos al movilizarse por las vías de la ciudad y estos bici carriles son una solución temporal para ello”, declaró la Concejal.
