Denunciamos el presunto abuso sexual del que fue víctima un menor de seis años de edad, que se presentó el día martes 9 de julio en una institución educativa del sur de la ciudad en la localidad de Bosa, exactamente en el colegio Carlos Alban Holguín sede C. Según versión de su mamá, el menor salió del salón al baño, donde trabajadores que se encontraban realizando reparaciones locativas al interior del plantel aprovecharon la ausencia de alumnos y docentes para agredir al menor. El niño es llevado por los padres al hospital El Tintal, donde activaron el código blanco, que confirmaría que el menor efectivamente había sido violado.
La madre del menor entregó declaraciones a medios de comunicación donde indica que el coordinador le dijo que no les avisara a los otros padres de familia, “para que no se agrandara el problema”. Y es que, al parecer, esta no sería la única vez que sucede un abuso sexual dentro de esta sede. Ya que varios padres de familia indican que en el colegio ya ocurrieron dos casos similares, uno de ellos, en noviembre del año pasado.
En reunión con representantes del consejo de padres de familia se acordó no iniciar clases en ninguna de las sedes del colegio hasta que se establezcan acciones conjuntas que permitan un retorno seguro para los estudiantes.
Para el día de hoy la institución citó a los padres para una reunión con la que pretende retomar las clases. En dicha reunión con representantes de gobierno distrital, dicen que ellos dieron todo lo que tenían que dar y que es algo que se les escapa de las manos. Argumentaron que tomaron medidas como que el niño que fue víctima del abuso estará en casa y le enviarán talleres, y que piden a los profesores estar más pendientes. Otra de las medidas presentadas es suspender las obras que se estaban realizando y el ingreso de personal de la obra, hasta que se aclaren los hechos. De acuerdo a información brindada, estas obras se encuentran desde el año pasado sin presentar avances significativos.
Nos preguntamos si estas medidas son suficientes para que las familias estén tranquilas y puedan enviar a sus hijos a estudiar, sabiendo que no es el primer caso de abuso que se presenta en instituciones educativas.
En dónde queda la seguridad de los niños y niñas en los planteles educativos y qué ruta establecida se da, para garantizar los derechos.
Exigimos que se haga una investigación exhaustiva de los hechos ocurridos, que las autoridades judiciales verifiquen la lista de trabajadores de la obra para establecer los responsables del hecho, sobre las supuestas respuestas del coordinador del colegio, y que se tomen medidas realmente efectivas para que no se vuelva a presentar un caso similar.