La juventud constituye el 24% de la ciudadanía bogotana, es decir más de dos millones de jóvenes que representan el motor social y económico de la capital, ubicados con mayor presencia en las localidades de Suba, Kennedy, Bosa, Ciudad Bolívar y Engativá, esto sin olvidar que en Bogotá habitan 70.237 jóvenes víctimas del conflicto armado. Para todas y todos los jóvenes que representan la potencia de nuestro capital humano, las prácticas y pasantías deben consolidarse como una experiencia profesional de enseñanza para el primer empleo, mejorando sus competencias y su orientación vocacional, por lo cual es indispensable que estén acompañadas de una remuneración económica que incentive su esfuerzo, estreche vínculos con la institucionalidad en condiciones dignas y de paso le contribuya a mejorar su calidad de vida y la de sus familias.
Esto es un logro y es muy importante dada la crítica situación de la juventud Bogotana actualmente por cuenta de la emergencia sanitaria del COVID-19. En el segundo trimestre de 2020, de acuerdo al DANE, la cifra de desempleo juvenil se ubicó en el 33,3%, que respecto al mismo periodo del año anterior aumentó en 14,6 puntos porcentuales. En total según la entidad son 372.000 jóvenes que se encuentran desempleados, implicando que respecto al mismo periodo del año anterior, se perdieron más de 100.000 empleos en la ciudad, lo que podría llevar a un aumento de la pobreza en esta población y a las brechas de vulnerabilidad por género.
Fuente: DANE (2020) Mercado Laboral de la Juventud
Del mismo modo, la brecha de desempleo juvenil entre hombres y mujeres también es significativa, pues mientras los hombres jóvenes tienen una tasa de desempleo del 30,6% las mujeres jóvenes se ubican en 38,3%, presentándose una brecha de 7,7 puntos porcentuales, mucho mayor que el mismo periodo en años anteriores que se ubica entre 4% y 5,7% respectivamente. Esto demuestra, además, que las mujeres jóvenes son las más vulnerables en estos tiempos críticos y que tienen mayores barreras para ingresar y permanecer en el mercado laboral que los hombres. Ante esta precaria oferta, surgen los proyectos de acuerdo para la dignificación de las prácticas y pasantías en el distrito.
Fuente: DANE (2020) Mercado Laboral de la Juventud
La juventud presenta diferentes barreras para ingresar al mercado laboral pues “mientras 80 % de los universitarios consiguen un trabajo en el primer año después de graduarse, esta cifra es de 65 % para quienes terminan carreras tecnológicas y de 30 % para técnicos” lo que deja en evidencia una problemática especialmente para quienes no tienen título universitario. Así mismo, se presentan otro tipo de barreras a la hora de buscar un empleo, como indica el informe “Tendencias mundiales del empleo juvenil 2020“ de la OIT, no se crean suficiente puestos de trabajo para aprovechar la capacidad de esta población y por otra parte, la limitada experiencia laboral que juega en contra a la hora de presentarse a un empleo inicial. Lo anterior deja en evidencia la necesidad de que las prácticas y pasantías se constituyan como experiencia y además que sean pagas para su sostenimiento económico, dado que también las y los jóvenes “continúan enfrentándose a unas altas tasas de pobreza y están cada vez más expuestos a formas atípicas, informales y menos seguras de empleo” OIT (2020)
La propia Veeduría Distrital ya ha señalado que es necesario mejorar la armonización entre instituciones educativas con empresas públicas y privadas para transformar las prácticas, pasantías, judicaturas y relación de docencia en salud en una experiencia profesional de enseñanza para el primer empleo. Al respecto, es un imperativo ético dignificar y remunerar las modalidades de grado ya mencionadas, con el fin de proporcionar opciones reales a la juventud en medio de tan infortunado panorama.
El programa nacional “Estado Joven” implementado a través de prácticas y pasantías remuneradas con un auxilio de un salario mínimo mensual, mediante la convocatoria para un aproximado de 2000 cupos para estudiantes entre los 18 y 28 años en los niveles tecnológico y profesional- ha demostrado la importancia de vincular a los jóvenes en la administración pública para comprender las complejidades territoriales y administrativas de la nación; igualmente los beneficios del auxilio económico mensual motivan y comprometen a los jóvenes a desempeñar funciones útiles para la entidad y su proceso formativo. Lastimosamente, el número de jóvenes en proceso de grado vinculados con modalidad de prácticas profesionales en el distrito por el programa Estado joven en el 2019 tan solo fue de 91, acumulando el 20% de los pasantes en la empresa Transmilenio.
En nuestro Proyecto de Acuerdo de prácticas y pasantías pagas le apostamos a la remuneración y dignificación, a ofrecer plazas a nivel distrital y a un proceso participativo y meritocrático, donde se garantizará la designación de forma paritaria entre hombres y mujeres ¡y se logró!. El 20 de agosto después de múltiples sesiones de trabajo conjunto con los Concejales Heidy Lorena Sanchez y Carlos Fernando Galan, se aprobó el primer debate del proyecto de dignificación de las prácticas laborales en el Distrito Capital de Bogotá en la Comisión Segunda de Gobierno. Trabajamos por la dignificación de las prácticas, pasantías, judicaturas y relación de docencia en salud en la ciudad, brindando subsidio de sostenimiento y mejorando la calidad de vida de los y las jóvenes de la ciudad.
¡Seguimos cumpliendole a la juventud Bogotana!