Según la cabildante a pesar del avance en la creación de políticas públicas de juventud y familia hay una ausencia de programas concretos y oportunidades para los jóvenes.
Enfatizó que desde la alcaldía de Lucho Garzón el enfoque se centró en disminuir la discriminación a la comunidad LGBTI, sin embargo en este esfuerzo se dejó a un lado a 1 millón seiscientos mil jóvenes.
Agregó que con una inversión millonaria de recursos públicos la comunidad LGBTI ha sido privilegiada para realizar grandes actividades durante todo el año, además de las desarrolladas en las localidades.
“En Bogotá tenemos más de 10 políticas públicas que de aplicarlas podrían salvar vidas como son el caso de la Política de familia, de juventud y prevención de sustancias psicoactivas, es sorprendente el abandono de los espacios de participación de los jóvenes como son los consejos locales de juventud por parte del Distrito, que al día de hoy como lo han manifestado varios consejeros el Distrito no los toma en cuenta” manifestó
Agregó que para bajar el índice de muertes de jóvenes por riñas es necesario enfocar el esfuerzo en su entorno familiar y brindar oportunidades tanto educativas como laborales, además de hacer un control a la venta y el consumo de sustancias psicoactivas en Bogotá.
“Llegó el momento de focalizar los esfuerzos en la juventud y la familia el enfoque de la administración debe cambiar sin dejar a un lado a las minorías de la ciudad. Pero es claro que si se quieren presentar soluciones a este problema de actos violentos realizados por jóvenes es necesario buenos programas de alto impacto social, lo cual se ha visto en esta administración solo con la población LGBTI “.
Y finalizó “El alcalde no puede ser un espectador más anunciando los problemas de la juventud vía twitter, es él quien debe tomas decisiones”.