“Como concejal de MAIS y de la coalición del Pacto, mi oposición a la segunda línea del metro no es un rechazo al progreso, sino un llamado a una planificación cuidadosa y responsable. Exigimos una evaluación exhaustiva de los impactos de la primera línea, y una estrategia que garantice beneficios reales y sostenibles para toda la comunidad. Solo con un enfoque transparente, participativo y equitativo podremos construir un sistema de transporte que realmente mejore la calidad de vida en Bogotá sin comprometer nuestro entorno ni nuestra equidad social”, indicó el Concejal Taita Oscar Bastidas Jacanamijoy.
En el marco del debate de oposición, surtido en el Concejo de Bogotá, sobre el tema de movilidad, el concejal étnico se concentró en el tema de la primera y segunda línea del metro de Bogotá, haciendo énfasis en que no se pueden repetir los errores del pasado, pasando por encima de los derechos constitucionales y legales que tienen comunidades originarias de la ciudad como por ejemplo el Pueblo Indígena Muisca.
Con testimonios presentados en videos, comerciantes y habitantes de las zonas intervenidas por la Primera Línea del Metro de Bogotá hicieron conocer la problemática social, ambiental y comercial que viven estas personas por cuenta de las obras y en muchos casos, los retrasos de las mismas.
Bastidas Jacanamijoy dejó la reflexión sobre la importancia de la eficiencia en el cumplimiento de la ejecución de obras, pues lo que para los constructores significa una pequeña fracción de tiempo como dos o tres meses, para un comerciante eso puede significar su quiebra.