Pacto Sumapaz: un pacto por la vida

Los humedales son zonas de transición entre los sistemas acuáticos y terrestres, constituyen áreas de inundación temporal o permanente sujetas o no a la influencia de la marea. El área de humedales en el planeta representa entre el 4-6% de la superficie de la tierra.[1]

La Convención de Ramsar es un acuerdo internacional que promueve la conservación y el uso racional de los humedales[2] y los define como “superficies cubiertas de agua, natural o artificial, permanente o temporales, estancadas o corrientes, dulces o saladas divididos en tres categorías: marinos y costeros, continentales y artificiales.[3]

Lamentablemente América Latina y el Caribe es la región con mayor reducción de humedales naturales a nivel mundial entre 1970 y 2015, con un declive de su superficie del 59%. Estos ecosistemas están desapareciendo rápidamente, según algunas estimaciones, desde 1900 han desaparecido el 64% de los humedales del planeta. Históricamente se han menospreciado y maltratado por considerarlos erróneamente terrenos baldíos sin valor e incluso focos de enfermedades que debían ser “saneados”.

Las principales causas de la degradación y pérdida de los humedales son: grandes cambios en el uso de la tierra como el aumento de la agricultura; la derivación de agua mediante represas, diques y canalizaciones; y el desarrollo de infraestructura principalmente en zonas urbanas. Poco a poco los humedales desaparecen en el país y los esfuerzos de algunas autoridades parecen insuficientes para contrarrestar este fenómeno[4].

En la sabana de Bogotá existían cerca de 50.000 hectáreas de estos ecosistemas hace 60 años y actualmente solo quedan 727 hectáreas, distribuidas en 15 humedales, o sea el 1.45%; sin embargo, aún faltan por reconocer muchos de ellos.

¿Por qué deberían importarnos los humedales?

-Proporcionan agua dulce para necesidades básicas (bebes, cocinar, asearnos) y para el riego.

-Alimentan a la humanidad. El arroz que es cultivado en arrozales que constituyen humedales es el alimento básico de casi 3.000 millones de personas y representa el 20% de la alimentación del mundo.

-Funcionan como amortiguadores de la naturaleza ya que en sus cuencas fluviales actúan como esponjas absorbiendo las precipitaciones y reduciendo el impacto de las inundaciones, mientras que en época de sequía su agua se libera.

-Son esenciales para la biodiversidad, para muchos anfibios y la migración de aves.

¿Qué ha pasado con los humedales?

Localidad Kennedy. El Humedal El Burro ha sido afectado a lo largo de los años por actores públicos y privados. En el pasado se le vio como terreno para secar y urbanizar y hasta botadero de basuras, potrero y punto de delincuencia, pero luego la comunidad empezó a verlo como un lugar importante por las especies de fauna y migraciones de aves.[5]

El humedal El Burrito, ubicado cerca al humedal El Burro durante la Alcaldía pasada perdió su carácter de área de protección ambiental. Hacia finales del año pasado ciudadanos del sector denunciaron que se iniciaron trabajos de extracción de tierra. La Secretaría de Ambiente dijo a la opinión pública que la construcción que se pretende realizar en el humedal no puede hacerse “de momento” pues no cuenta con la licencia de construcción. Ambientalistas han intentado en los últimos años recuperar la conectividad hídrica entre el Burro y el Burrito y han intentado que este último sea reconocido como humedal[6]. Pero su futuro es incierto aún.

Dado lo anterior, el primer paso que se debe dar debe apuntar a que desde los gobiernos y las entidades de la Administración se reconozca la totalidad de estos ecosistemas en el Distrito Capital y se generen acciones en conjunto con la comunidad para reconstruir imaginarios culturales que permitan su recuperación, protección y preservación.

 Y en segundo lugar, que como ciudadanos tomemos conciencia sobre la importancia que revisten estos ecosistemas no sólo para nosotros como seres humanos sino especialmente para todas las especies animales que habitan allí.

Invitamos a los capitalinos a que visiten el Jardín Botánico que en esta última semana de febrero tiene una oferta cultural de exposición fotográfica que enseña la importancia de los humedales.

Concejal Partido Liberal